El equipo técnico de la sociedad civil ante el acuerdo a que ha...
La Cámara de Comercio de La Libertad (CCLL) ha realizado la sexta edición del programa de vacaciones útiles "Semillero Emprendedor", una iniciativa diseñada para fomentar el espíritu empresarial en niños y adolescentes. Y esta vez el programa se ha extendido al distrito de Casa Grande, gracias a una iniciativa de la empresa azucarera. A través de un enfoque lúdico y creativo, este programa busca desarrollar las habilidades y destrezas de los participantes, preparándolos para el desafiante mundo de los negocios.
El "Semillero Emprendedor" está dirigido a adolescentes de entre 11 y 16 años que deseen potenciar su creatividad, liderazgo y confianza, mientras adquieren conocimientos sobre planeamiento estratégico, innovación y habilidades blandas. La CCLL, comprometida con la formación de los futuros empresarios de la región, ha diseñado un programa que permite a los jóvenes no solo identificar sus talentos y fortalezas, sino también desarrollar una mentalidad emprendedora.
Uno de los principales objetivos del programa es que, al culminar las clases, los participantes sean capaces de plasmar sus ideas de negocio con una visión clara y estructurada. Para ello, cuentan con el apoyo de profesionales de prestigio y amplia experiencia, quienes guían a los adolescentes en el proceso de aprendizaje mediante una metodología dinámica y participativa.
Vale anotar que el desarrollo es imposible si el sistema educativo no capitaliza a la sociedad a través de la formación de una fuerza laboral educada, con gran capacidad de innovar y competir en los mercados globales. A los países occidentales les tomó más de dos siglos aprender esta lección del desarrollo, mientras que a los países del sudeste asiático, los llamados Tigres de Asia, les demandó cuatro décadas. El mejor ejemplo es Corea del Sur que, a través de una reforma integral de la educación y la promoción de la ciencia y tecnología, ha logrado el desarrollo y competir en todos los mercados de la digitalización y la IV Revolución Industrial.
La importancia de inculcar el emprendimiento desde edades tempranas radica en la posibilidad de fomentar la autonomía, la superación personal y el desarrollo de habilidades clave como la asertividad, la toma de decisiones y la resolución de conflictos. Aunque algunas personas nacen con un instinto emprendedor, muchas de estas competencias pueden adquirirse y fortalecerse a través de programas como el "Semillero Emprendedor".
El programa también pone especial énfasis en la inteligencia emocional, ayudando a los adolescentes a identificar sus emociones, gestionar el estrés y fortalecer su autoconfianza. Asimismo, se busca inculcar valores como el esfuerzo, el autocontrol y el optimismo, elementos esenciales para construir una sociedad más innovadora y resiliente.
El "Semillero Emprendedor" se presenta como la mejor alternativa para aprovechar las vacaciones de manera productiva. La formación integral que ofrece no solo prepara a los adolescentes para emprender sus propios negocios en el futuro, sino que también les proporciona herramientas esenciales para afrontar los desafíos del mundo moderno con una mentalidad proactiva y creativa.
Con este tipo de iniciativas, la Cámara de Comercio de La Libertad y la empresa Casa Grande reafirman su compromiso con la educación y el desarrollo económico de la región, apostando por una nueva generación de emprendedores capaces de transformar su entorno y generar un impacto positivo en la sociedad.
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