LA COLUMNA DEL DIRECTOR >

Disecando a la izquierda

Disecando a la izquierda
Víctor Andrés Ponce
01 de diciembre del 2014

¿Cómo perdió sus raíces populares y acabó enfrentada con el Perú emergente?               

Una de las preguntas que siempre se hace cualquier observador extranjero de la política peruana es por qué no existe una izquierda tal como hay en otros países de América Latina. Quizá una primera explicación tenga que ver con el viraje ideológico que las izquierdas latinoamericanas empezaron a procesar en los ochenta, un viraje que si bien nunca las alejó de las recetas estatistas, sí las acercó a la democracia y a los entendimientos. Con diferentes grados y énfasis algo de eso sucedió en Chile, Uruguay y Brasil.

Sin embargo en el Perú, no obstante el triunfo electoral a la alcaldía de Lima con Alfonso Barrantes, la llamada Izquierda Unida se blindó contra el viraje ideológico en el preciso momento en que el modelo de sustitución de importaciones estaba desplomándose y los cimientos del “socialismo real” de la ex Unión Soviética ya habían sido dinamitados por la realidad económica.

De una u otra manera, ante el evidente cambio de época, la izquierda comenzó un proceso de involución y mediocridad ideológica. Algunas interpretaciones de la desaparición de la izquierda ponen el acento en la manera cómo el terrorismo senderista acabó con cualquier posibilidad de utopía colectivista. Después de Sendero la palabra comunista y socialista adquirió connotaciones impensadas. Todas estas aproximaciones tienen su parte de verdad.

La Izquierda Unida, que había irrumpido como un movimiento político de masas en el siglo XX, estalló en infinitos pedazos y hasta hoy las esquirlas de esa explosión saltan en cada proceso electoral. Pero de esa diáspora aparecieron claramente definidas una izquierda mesocrática limeña, que llegó jadeando con Susana Villarán hasta la reciente elección municipal de Lima; y otra provinciana, enraizada en sectores regionales y antimineros, que se expresa en Patria Roja.

Con la emergencia del proyecto bolivariano de Hugo Chávez, casi todas las facciones de izquierda convergieron detrás de la candidatura de Ollanta Humala en el 2011, pero el proyecto nacionalista, antes que un proyecto ideológico y programático, era uno dinástico cuyo programa era el poder por el poder.

Después de auparse al proyecto nacionalista y ser expulsada de manera indecorosa, la izquierda hoy aparece desolada, reducida a su mínima expresión, y sin posibilidades electorales. Pueden haber ensayos, libros y tratados, sobre porqué una de las izquierdas más potentes del continente se convirtió en nada, y porqué no dejó legado.

Pero hay un hecho que es imposible de obviar. La izquierda se volvió un pez sin agua cuando de las migraciones e invasiones en las ciudades de los años cincuenta no emergieron proletarios, sindicatos y desarrapados dispuestos a defender los proyectos colectivistas, sino propietarios y empresarios informales que se agruparon en centenares de mercados populares que le cambiaron para siempre el rostro al país.

En el Perú la idea de lo popular no se identifica con pobreza sino con una informalidad que, por sus hábitos y prácticas, desarrolla un capitalismo salvaje absolutamente hayekiano. ¿Cómo podía prosperar una izquierda en esos contextos sociales?

De allí que, por ejemplo, en la última elección de Lima, la izquierda villaranista representó a los sectores mesocráticos tradicionales de la ciudad y se enfrentó abiertamente con los sectores emergentes y populares de la metrópoli. La distancia era tan sideral que la izquierda de la chalina empezó a echar mano de argumentaciones clasistas para intentar explicar porqué la señora Villarán no podía conectarse con los sectores populares. En esta última imagen podría estar una de las razones más poderosas del porqué la izquierda peruana ha desaparecido.

Por Víctor Andrés Ponce

01 - dic - 2014

Víctor Andrés Ponce
01 de diciembre del 2014

NOTICIAS RELACIONADAS >

La estupidez progresista es sideral: ¡Huaycoloro en España!

Columna del Director

La estupidez progresista es sideral: ¡Huaycoloro en España!

Una de las razones de la terrible y devastadora inundación de l...

19 de noviembre
El progresismo y el colectivismo sin peruanidad

Columna del Director

El progresismo y el colectivismo sin peruanidad

El proyecto de boicotear la Cumbre Mundial de la APEC en Lima para des...

01 de noviembre
El paro de transportistas golpea al Ejecutivo

Columna del Director

El paro de transportistas golpea al Ejecutivo

  La frágil estabilidad que se instaló en el pa&ia...

11 de octubre

COMENTARIOS