Majes Siguas II enfrenta su peor encrucijada

La controversia en torno al proyecto de irrigación Majes Siguas II ha alcanzado niveles críticos, pues los enfrentamientos entre la empresa concesionaria Angostura Siguas (perteneciente a la firma española Cobra), con la Autoridad Autónoma de Majes (Autodema, una entidad dependiente del Gobierno Regional de Arequipa) no parecen tener solución. Esta situación ha desembocado en un reciente y significativo suceso: el inicio de un nuevo proceso de trato directo por parte de Angostura Siguas con el Sistema de Coordinación y Respuesta del Estado en Controversias Internacionales de Inversión (Sicreci), entidad perteneciente al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).

“De no llegar las partes a un acuerdo en el plazo de 6 meses a computar desde la fecha de remisión de esta nota, estas pretensiones deberán ser decididas por un tribunal arbitral internacional constituido de acuerdo con el Reglamento de Arbitraje del Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi)”, señala el documento enviado al Sicresi.

El punto de partida de esta controversia se remonta a la decisión previa de la concesionaria de rescindir el contrato de concesión, alegando incumplimientos por parte de Autodema. En su comunicado oficial, la empresa enfatiza que el contrato de concesión llegó a su término el 1 de septiembre de 2023 debido a la falta de corrección de los incumplimientos por parte del concedente y la omisión en la activación válida del mecanismo de solución de controversias, de acuerdo con lo establecido en el Contrato de Concesión. Cabe mencionar que el plazo para llevar a cabo las correcciones expiró el 31 de agosto de 2023.

Dentro del proceso de trato directo, la concesionaria busca que se reconozca la validez de la resolución del contrato de concesión por parte de Autodema, debido al incumplimiento de esta última de sus responsabilidades contractuales. Asimismo, se pretende determinar la liquidación del contrato y obligar al concedente a compensar los daños adicionales sufridos por la concesionaria que no estén cubiertos por la liquidación. Esta solicitud incluye también los daños derivados de los incumplimientos contractuales del concedente y de la caducidad de la concesión, cuyo monto provisional se estima en US$ 421 millones.

Para comprender a fondo las razones detrás de la declaración de caducidad del contrato por parte de Cobra, es necesario analizar los tres puntos fundamentales que motivaron esta drástica medida. En primer lugar, se destaca el incumplimiento por parte de Autodema en la entrega del control de los terrenos correspondientes a la primera y segunda fase del proyecto. En segundo lugar, se menciona el incumplimiento de la obligación de revisar y aprobar las nuevas obras realizadas, así como la falta de contratación de supervisión especializada. Por último, se hace hincapié en el incumplimiento de compromisos y obligaciones sustanciales que han obstaculizado la capacidad del concesionario para cumplir con sus responsabilidades según los términos del contrato. 

El Proyecto Majes Siguas representa una oportunidad extraordinaria para impulsar el sector agrícola en la región de Arequipa y en el sur del Perú en su conjunto. Este ambicioso proyecto se centra en la explotación de los recursos hídricos del río Siguas, con el objetivo de irrigar extensas áreas de tierra destinadas a la agricultura y generar energía hidroeléctrica. Con su implementación, se prevé la irrigación de aproximadamente 40,000 hectáreas de nuevas tierras de cultivo, incluyendo parcelas que superan las 200 hectáreas. Este impulso no solo atraerá nuevas inversiones, sino que también fomentará la adopción de tecnologías avanzadas y el desarrollo de cadenas agroexportadoras, lo que fortalecerá de manera significativa la economía regional.

La inversión total requerida para llevar a cabo este proyecto se estima en aproximadamente US$ 654 millones, y se espera que, a largo plazo, este esfuerzo represente un impacto económico nominal cercano a los S/ 4,300 millones. Durante la fase de construcción, se prevé que el proyecto genere un efecto positivo en diversos sectores económicos, destacando la construcción (43%), los servicios (28%), la manufactura (14%), el comercio (7%) y otras actividades (7%). Además, se estima que se crearán unos 83,000 puestos de trabajo durante esta etapa, generando oportunidades laborales significativas y contribuyendo al desarrollo socioeconómico de la región.

Este proyecto ha sido objeto de atención y expectación tanto a nivel regional como nacional debido a su envergadura y potencial para transformar la economía de la región de Arequipa. Sin embargo, los desafíos y desacuerdos actuales plantean serias interrogantes sobre su futuro y la viabilidad de alcanzar los objetivos planteados originalmente.