Darío Enríquez

Articulación urbana y conectividad territorial en el trapecio andino

Desafíos y oportunidades para Huancavelica, Ayacucho y Apurímac

Articulación urbana y conectividad territorial en el trapecio andino
Darío Enríquez
26 de septiembre del 2025

 

El Trapecio Andino —conformado por Huancavelica, Ayacucho y Apurímac— ha sido reconocido como el núcleo histórico de la pobreza rural en Perú. Su desarrollo ha estado limitado por la complejidad geográfica, el legado de violencia y un extractivismo persistente. No obstante, al margen de una "politicósfera" en crisis permanente, la economía regional muestra signos de crecimiento sostenido, validando las “cuerdas separadas” y abriendo una interrogante clave: ¿cómo puede el crecimiento urbano y la conectividad territorial impulsar el desarrollo de esta zona?

Ejes de articulación territorial y nodos urbanos emergentes

El futuro del Trapecio Andino depende tanto de sus recursos naturales como de la consolidación de una red urbana articulada a los principales ejes productivos del país. Estas ciudades, lejos de ser simples centros administrativos, emergen como nodos comerciales y de servicios que absorben población rural, dinamizan el consumo interno y configuran un mejor desarrollo territorial.

Para ello, es necesario fortalecer tres ejes de conexión estratégica con centros urbanos externos:

  1. Huancavelica y el Eje del Mantaro. La región más pobre del país encuentra su mayor potencial en la articulación con Huancayo y el Valle del Mantaro, canalizando su producción agrícola hacia mercados más dinámicos. Aunque el "tren macho" ha reiniciado operaciones, se requiere una red ferroviaria moderna y funcional que no solo cubra Huancayo-Huancavelica, sino que incluya otros núcleos urbanos del Trapecio. Esta infraestructura, complementada por carreteras en buen estado, podría convertirse en eje vertebrador del desarrollo regional, facilitando el tránsito de bienes, personas y servicios en un territorio marcado por dispersión y aislamiento.
  2. Apurímac y el Eje Sur. Ciudades como Abancay y Andahuaylas buscan superar su vínculo histórico con el VRAEM y sus secuelas de violencia, para integrarse al circuito turístico y comercial del sur, centrado en Cusco. Esta articulación es clave para activar el turismo y el comercio regional.
  3. Ayacucho y la puerta a la costa. Aún marcada por haber sido centro de operaciones del terrorismo de Sendero Luminoso, Ayacucho posee una conexión estratégica con Ica. Esta vía facilita la exportación agrícola y la inserción en mercados nacionales e internacionales, siendo fundamental para su consolidación económica.

Dinámicas interurbanas y escenarios de integración regional

El impulso urbano del Trapecio Andino se sostiene en una red de al menos cinco ciudades propias y tres grandes ciudades externas. Huancavelica (40,000 habitantes) se conecta con Huancayo, a 150 km de distancia, en una relación funcional que trasciende límites administrativos. Hacia el sur, Ayacucho (150,000 habitantes) se articula con Ica —centro agrícola costero— a través de una ruta de 290 km. En esta zona, Huanta (34,000 habitantes), situada a solo 50 km de Ayacucho, sugiere un incipiente proceso de conurbación, por su cercanía y alta interacción.

En Apurímac, la dinámica urbana es compartida por Abancay y Andahuaylas. Ambas ciudades muestran un importante grado de actividad, pero en los últimos años Andahuaylas ha evidenciado un ritmo más acelerado. Aunque su población urbana (58,000 habitantes) es menor que la de Abancay (72,000 habitantes), su proyección territorial y su vínculo con el corredor Cusco–Choquequirao, la nueva joya turística, le otorgan un rol estratégico. Ambas están conectadas por 130 km y forman parte de una ruta que se extiende hasta Cusco (a 190 km de Abancay), principal motor turístico del país.

El potencial urbano no se limita al comercio. La Semana Santa en Ayacucho atrae turismo cultural, y su conectividad con Ica y Cusco refuerza una economía diversificada. Las distancias de 6-7 horas con la costa y de 4-5 horas con Cusco permiten vislumbrar una integración funcional que trascienda las fronteras político-administrativas.

Visión estratégica para el desarrollo territorial sostenible

La "cuestión urbana" en el Trapecio Andino es clave para enfrentar sus desafíos. La consolidación de ciudades conectadas y la inversión en infraestructura vial —incluyendo el estratégico desarrollo ferroviario— deben integrar una región con vasto potencial humano y productivo. Si el Estado y la sociedad apuestan por una visión de largo plazo, la conectividad física será el verdadero motor de una dinámica sostenida de desarrollo.

Darío Enríquez
26 de septiembre del 2025

NOTICIAS RELACIONADAS >

El megapuerto de Chancay y su fuerza transformadora

Columnas

El megapuerto de Chancay y su fuerza transformadora

El Perú atraviesa un momento decisivo en su desarrollo territor...

19 de septiembre
La cuestión urbana en el corazón de la Amazonía peruana

Columnas

La cuestión urbana en el corazón de la Amazonía peruana

En el extenso territorio peruano, el desarrollo urbano ha estado tradi...

12 de septiembre
La precariedad urbana en el Perú: más allá de la pobreza monetaria

Columnas

La precariedad urbana en el Perú: más allá de la pobreza monetaria

  En las ciudades del Perú se manifiesta un fenóme...

05 de septiembre

COMENTARIOS