Jorge Varela

¿Aló?, Democracia Cristiana

Una propuesta oportunista y torpe

¿Aló?, Democracia Cristiana
Jorge Varela
29 de mayo del 2023


¡Qué curioso! Cuando en Chile la nave de Boric cruje y a los botes auxiliares de salvamento y rescate les ha entrado demasiada agua, y además nadie sabe dónde se encuentran los chalecos salvavidas –si es que acaso los había a bordo–, a uno de sus pilotos operadores de puerto, que pretenden conocer las coordenadas geográficas, se le ha ocurrido una ruta de escape para que el ‘alabado progresismo’ zafe de los arrecifes y no encalle. Para este piloto fundador “el desafío de aquí en adelante será encontrar una forma de conectar con ese electorado de identidad cristiana”, léase DC. 

Desde acá se escuchan sus cantos seductores y envolventes: “la Democracia Cristiana chilena nació como un proyecto de transformación estructural”. “En este sentido, el progresismo no puede darse el lujo de regalarle el socialcristianismo a la derecha”. (Noam Titelman, artículo “La rebeldía se volvió religiosa?, Ex-Ante.cl, 21 de mayo de de 2023) 

¿Cuál es la fórmula propuesta? 

Según Titelman, solo una coalición que vaya desde el socialcristianismo hasta el Partido Comunista, incluyendo al Frente Amplio y toda la diversidad de fuerzas del progresismo, podría aspirar a construir un proyecto que le haga sentido a los diversos sujetos populares de Chile y ser un proyecto de mayorías. “Si el progresismo tiene posibilidades de convocar a estas nuevas mayorías que se han manifestado en las recientes elecciones, necesita incorporar una matriz socialcristiana… Podría ser un proyecto que convoque a los nuevos votantes que se sumaron al padrón y que compita con los proyectos de la ‘derecha’ sin complejos” (Ex-Ante.cl, 21 de mayo de 2023).-

Es la misma idea que había sostenido días antes en una entrevista: “a nivel político o estratégico, estoy convencido de que necesitamos coaliciones amplias, que unifiquen desde la tradición social cristiana hasta el Partido Comunista” (“La Tercera”, 7 de mayo de 2023)

Un diseño oportunista y torpe 

Titelman arguye que “es probable que el Frente Amplio nunca pueda apelar a esa identidad socialcristiana” como lo ha hecho la Democracia Cristiana. Por eso, “si el progresismo quiere ser proyecto de mayorías necesitará de coaliciones amplias que incluyan al socialcristianismo”. (entrevista en “El País” de España, 22 de mayo de 2023)

“La Nueva Izquierda del Frente Amplio puede generar un relato convocante en que se reconozca el valor de la comunidad, las familias en todas sus formas y la solidaridad. Un relato en que se ponga el foco en lo que George Orwell denominó la common decency y que se parece bastante a la idea de progresismo económico con respeto a la tradición… Un relato como ese podría ser el sustento de una coalición suficientemente amplia para incluir a partidos que sí pueden apelar con su acervo histórico a las identidades populares socialcristianas” (entrevista mencionada).

La DC se sabe deseada por algunos monos peludos 

Para Alberto Undurraga, presidente de la DC, el mayor desafío de su colectividad es “sobrevivir como partido”. Según explicó a sus pares, “tenemos amenazas normativas: mientras nos hacen todo tipo de gestos desde el gobierno y el oficialismo, desde ese mismo gobierno y oficialismo empujan la regla del 5%”, en referencia a la norma que fija un umbral electoral. La ex-senadora Carolina Goic ha dicho con mucha honestidad que: “si de algo no hay duda es que la gente (...) premia la coherencia”. “¿Qué hemos hecho nosotros en la DC?” “La gente nos ve a un lado y después al otro, después a un lado y después al otro (…)”. (“La Tercera”, 9 de mayo de 2023)

La Democracia Cristiana y el siglo XXI 

Carolina Goic golpeó en el clavo. La gente ha visto a la DC durante el transcurso del siglo XXI como una colectividad acomodaticia que desperdició gran parte de sus tesoros ideológicos, aunque su declive histórico tenga raíces que se remontan al final de la pasada década de los años sesenta, momento en que ocurrió su primera fractura importante impulsada por personajes que optaron por comulgar con Marx y abandonaron a Santo Tomás de Aquino y a Maritain. Luego la grieta se extendió y dio paso a otros desprendimientos y desgastes orgánicos. 

El período comprendido entre 1968 y 1973 es para dejarlo en el trayecto hacia el olvido. 

La tentación antidemocrática revoloteó por allí y depositó sus huevos. Algunos camaradas hasta entregaron su preciada virginidad demócrata, en una acción estéril que resultó fatal para Chile y para ellos. Aunque hoy sea fácil decirlo: no era este el camino de la redención. Lo que fue un ciclo de incertidumbre estratégica se transformó además en un tiempo de negación ideológica e inconsecuencia para varios de sus miembros. 

Ya en la aurora del siglo XXI, a partir del retorno a la democracia, la DC heredera de la Falange Nacional fue oxigenada por aires nuevos que le dieron vida suficiente para llegar al presente siglo, pero su alma y su cuerpo ya no eran los mismos. Carente de energías vio arribar el inicio de siglo. El mal habitaba en sus vísceras y nunca supo reaccionar a tiempo, ni encontró a los líderes que la sanaran. Su viaje de regreso a Ítaca quedó suspendido. 

En esta condición deplorable, postrada moralmente, aceptar una propuesta tardía como la descrita, sería morir sin alcanzar la tierra prometida por fariseos necios que no creen ni en su propia salvación.

Jorge Varela
29 de mayo del 2023

NOTICIAS RELACIONADAS >

Mario Vargas Llosa y su visión del neoliberalismo

Columnas

Mario Vargas Llosa y su visión del neoliberalismo

Después que se diera a conocer la última encíclic...

15 de abril
Opciones socialistas en disputa

Columnas

Opciones socialistas en disputa

Pensar el socialismo frente a lo que podría ser su recambio o a...

08 de abril
El espectro político chileno

Columnas

El espectro político chileno

El espectro político chileno de izquierda a derecha o de derech...

01 de abril

COMENTARIOS