Basta de caos vehicular en Lima

Como es de público conocimiento, los dos grandes problemas que afronta la ciudad de Lima son la inseguridad ciudadana y el caos vehicular. Sobre este último punto, analizaremos brevemente su problemática y los nefastos efectos que tiene en los limeños.

Los habitantes de Lima Metropolitana experimentan una odisea cada día para poder llegar a su trabajo, hogar o cualquier otra parte. El caos vehicular se torna terrible y afecta la estabilidad emocional de los ciudadanos a diario, según detalla el reciente II Estudio de Tráfico y Tendencias de Movilidad Urbana en Lima 2018. Este estudio, realizado por Marketwin y publicada por el PAD - Escuela de Dirección de la Universidad de Piura, reveló que el 72% de los limeños encuestados se sienten estresados en demasía por el agobiante tráfico en la ciudad.

Asimismo, dicho estudio informó que el 39% de limeños termina deprimido cuando hacen uso del transporte en la ciudad, y que el 51% considera que el alborotado tráfico les quita calidad de vida, pues les impide pasar tiempo con su familia o realizar otras actividades. Pero este caos vehicular no solo afecta de manera psicológica, también traería males físicos. El 24% de los encuestados reveló que sufren dolores en el cuerpo, como contracturas musculares, afecciones en los huesos, males urinarios, problemas respiratorios, entre otros.

Asimismo, el citado estudio reveló que el 51% de limeños pierde más de dos horas al día atrapado en la congestión vehicular; y que para el 39% de encuestados, el gran responsable es el exceso de autos en la ciudad. Por otro lado, el 35% responsabiliza a la imprudencia y falta de respeto a las normas de tránsito, y el 25% cree que la culpa es de los “micros” y “combis”.

En base a dicho estudio, podemos concluir que la situación es insostenible, y que los grandes responsables son las autoridades competentes, que no han logrado desarrollar un planificado trabajo de desarrollo vial en Lima, eficiente y eficaz. Durante décadas parece que ha primado la negligencia y la corrupción, así como el deseo cada autoridad competente que asumía el mando, de empezar su propia agenda y no continuar algunos buenos proyectos de sus antecesores.

Entonces la recientemente creada Autoridad Única de Transporte para Lima y Callao, que goza de amplio consenso entre los especialistas, tiene un gran reto que cumplir: acabar con la atomización de autoridades de transporte en la capital, que impide una gestión ordenada y eficiente de este servicio.

La crítica recurrente al sistema de transporte en la capital es que existe una autoridad fragmentada, que incluso superpone sus funciones, como son las municipalidades de Lima y Callao, la Autoridad Autónoma del Tren Eléctrico, y el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC). Lo que hace este nuevo organismo es centralizar las competencias en una entidad.

Esta entidad que es un órgano técnico especializado, adscrito al Ministerio de Transportes y Comunicaciones —con personería jurídica de derecho público interno y con autonomía administrativa, funcional, económica y financiera— tendrá en su Consejo Directivo a ocho miembros, designados por un período de cinco años por el sector Transportes. Dos miembros serán propuestos por el MTC, uno de los cuales lo preside; un miembro propuesto por el Ministerio de Economía y Finanzas; y un miembro propuesto por el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento. De igual manera, cuatro miembros son propuestos por las municipalidades provinciales existentes en el territorio, en proporción al número de habitantes y conforme a los mecanismos de designación del reglamento.

Desde esta tribuna deseamos éxitos a esta nueva entidad y al alcalde de Lima recientemente electo, Jorge Muñoz. Y les decimos ¡manos a la obra!, no perdamos más tiempo, la ciudadanía lo exige. ¡Basta de caos vehicular en Lima!