¿Maduro disolverá el Parlamento?

Con el apoyo del TSJ convocará elecciones legislativas

La reciente crisis entre el gobierno autoritario de Nicolás Maduro y la Asamblea Nacional Bolivariana (en manos de la oposición democrática) sobre la aprobación del presupuesto nacional para el 2017 marca un nuevo capítulo en la confrontación entre el chavismo y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Diversas opiniones de analistas empiezan a ver lo que sería el nuevo objetivo del gobierno autoritario socialista: disolver la Asamblea Nacional para evitar que el chavismo pierda el poder.

Vale recordar que la primera gran derrota que sufrió el autoritarismo bolivariano, luego de la muerte de Hugo Chávez y el ascenso en el mando de Nicolás Maduro, fue la pérdida de la Asamblea Nacional, en las elecciones legislativas de diciembre del año pasado. Aquella derrota supuso además que la MUD obtenga la mayoría simple y que haya estado al borde de la mayoría absoluta, de no haber sido por la impugnación ante los órganos electorales contra dos parlamentarios del estado Amazonas.  Así, con una Asamblea en contra, el chavismo ha tenido que utilizar al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y otras instituciones —como el Consejo Nacional Electoral, cuya presidenta, Tibisay Lucena, es aliada del gobierno autoritario— para detener las olas de cambio.

De tal manera que Maduro —con una minoría parlamentaria, con encuestas en las que el 75% de venezolanos está de acuerdo con su salida y con una crisis económica y social sin precedentes— se ha propuesto, a cualquier precio, aferrarse al poder. De allí que el gobierno está tensando las relaciones con el Legislativo. La Asamblea Nacional está atada de manos, ya que un fallo del Tribunal Supremo de Justicia, cuyos miembros han sido elegidos por el chavismo, ha ordenado que el Parlamento no puede decidir sobre la formulación de un presupuesto público que es ocho veces más grande que el antecesor. Según la constitución bolivariana, el Parlamento es el único fuero donde se pueden decidir la aprobación del presupuesto público, sin embargo el chavismo se salta la propia constitución que ellos elaboraron hace doce años.

El golpe de Maduro en contra del Parlamento va incluso más allá. Ya el presidente ha planteado que adelantará las elecciones legislativas. ¿Cómo así el gobierno plantea unas nuevas elecciones para el Parlamento? Quizá la respuesta esté en lo abultado del presupuesto 2017. Entonces está claro si el gobierno de Maduro, con el dinero estatal, seguirá sosteniendo y ampliando los programas sociales. La finalidad es que si Maduro —con apoyo del TSJ— logra adelantar las elecciones legislativas podría llegar con mejores oportunidades para arrebatarle a la oposición democrática el Parlamento.

Entonces surge otra pregunta: ¿cuál será la estrategia de la oposición en torno al MUD? Hoy la oposición ha puesto todos sus esfuerzos en promover un referéndum revocatorio, que todo indica que ha sido enterrado por el Consejo Nacional Electoral. Incluso el gobierno ha descartado un referéndum en el próximo año, reafirmando su carácter autoritario y dictatorial. Todo indica que no será fácil la salida del chavismo del poder. Quizá es momento de que la MUD asuma una estrategia distinta.