El chavismo aplaza el referéndum

Millones de venezolanos saldrán a protestar a las calles el 1 de setiembre

En una conferencia de prensa Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), máximo órgano en materia electoral en Venezuela, ha hecho pública la hoja de ruta del proceso que se debe seguir para revocar al presidente Nicolás Maduro. Lucena indica que si la oposición venezolana cumple con los plazos, el referéndum revocatorio podría realizarse entre enero y marzo del 2017, y no a fines del 2016. Con semejante decisión Lucena pone más trabas al bloque opositor y hace evidente el verdadero propósito, que es evitar a toda costa que Maduro sea retirado del gobierno mediante la revocatoria. Hoy una mayoría de venezolanos votaría a favor de la salida de Maduro.

Según Lucena, la revocatoria no puede realizarse a fines de este año porque no cumpliría los plazos establecidos por la ley electoral. La presidenta del CNE indicó también que aunque la oposición ya cumplió con el primer paso, ha sido culpa de los líderes que se haya demorado más de treinta días, y no los cinco legalmente admitidos por el órgano electoral. No es un secreto que el régimen ha copado todas las instituciones y era de esperarse que el CNE y Lucena, se pongan a las órdenes del régimen autoritario de Nicolás Maduro. Vale recordar que la oposición venezolana había cumplido de manera legal el primer paso para activar el referéndum. En tan solo cinco días la oposición recolectó más del 1% de firmas que se necesitaba para iniciar el proceso revocatorio. Sin embargo, en una decisión absurda, Lucena indicó que se debía revisar las firmas nuevamente y que la propia oposición debía asumir los gastos.

Lo que ahora toca es pasar al segundo paso, que es recolectar cuatro millones o el 20% de las firmas solicitadas por el CNE. De alcanzarse este número se podría activar el proceso revocatorio; no obstante ¡depende de la entidad electoral otorgar el permiso para que la oposición democrática recojas las firmas! Se estima entonces que el CNE convoque en octubre para que la oposición recolecte las firmas. Según la ley electoral el CNE puede tomarse noventa días para revisar los cuatro millones de firmas. Líderes opositores como Henrique Capriles no han dado por descontado el proceso a fin de este año.

En ese sentido, la oposición democrática está organizando una respuesta en las calles contra la intención del régimen de no dejar el poder. Se estima que el 1 de setiembre millones de venezolanos salgan a las calles de forma pacífica para hacerle frente a las bravatas antidemocráticas del chavismo y del CNE. Hoy, según una encuesta de Datanálisis, el 65% de los venezolanos estarían a favor de la salida de Maduro.

Todo aquello sucede en un momento de crisis de la economía venezolana. Los estimados económicos para Venezuela son terribles. El Fondo Monetario Internacional proyecta una caída del PBI por más de 10% y una inflación acumulada del 700%.

Por lo visto el chavismo no dejará fácilmente el poder en Venezuela.