La canción criolla de duelo

Sobre el sensible deceso del destacado compositor musical Juan Mosto

Autor de valses emblemáticos como “Qué importa” y “Quiero que estés conmigo”, (popularizados por Lucha Reyes y Eva Ayllón, respectivamente), el compositor y cantante Juan Mosto dejó de existir el último viernes (19 de diciembre), a los 78 años de edad, en Ciudad de México. El motivo fue una larga enfermedad que se vio agravada por las dificultades económicas que Mosto atravesó en la última etapa de su vida pues, según su familia, la Asociación Peruana de Autores y Compositores (Apdayc) no le hacía los pagos correspondientes a las regalías por sus numerosas y exitosas canciones.

Juan Mosto Domecq nació en Lima el 23 de enero de 1936, por lo que perteneció a la tercera y posiblemente última generación de grandes intérpretes y compositores de música criolla. Hombre de barrio, en su juventud cultivó tanto la vida bohemia como la deportiva. A los 16 años compuso su primera canción –“Cabecita blanca” dedicada a su madre”– y paralelamente se iniciaba como futbolista en el Sport Boys, con el que llegó a jugar en primera división, en la segunda mitad de los años cincuenta. Pero finalmente la vocación musical se impuso y Mosto dejó el fútbol por las partituras y los micrófonos.

Así, su gran etapa de compositor fueron los años sesenta y setenta, cuando la segunda generación de artistas “criollos” (la de Oscar Avilés, Chabuca Granda y Jesús Vásquez, entre otros) estaba en pleno apogeo y el género empezaba su declive. Fue una época dominada por los famosos festivales musicales, en los que Mosto pronto destacó: logró el tercer puesto en el Festival de Trujillo 1968, con el vals “Mi mundo”; el segundo lugar en el Festival de Ancón 1969 con “Dos caminos”; el primer puesto en el Festival de Trujillo 1969 con “Dime”; el primer lugar en el Festival de Ancón 1970 con “Qué importa”; y el primer lugar en el Festival de Trujillo 1974 con “Quiero que estés conmigo”; entre muchos otros.

Estas canciones fueron después interpretadas por los mejores cantantes de la época, desde Jesús Vásquez y Edith Barr hasta Lucha Reyes y Lucía de la Cruz. Eran composiciones que conjugaban las intensas historias de amor con homenajes a la familia y los amigos de barrio, y que le ganaron a Mosto el sobrenombre de “el poeta de la canción criolla”. En esos años el periodista Juan “Cumpa” Donayre escribió: “Mosto es un compositor lleno de amor y esperanza por lo suyo, que es también lo nuestro: la patria, la libertad, el amor, el barrio. En cuanto Juan canta a la vida, es un poeta. Un sincero poeta”.

Mosto además tuvo a su cargo el programa radial “Así canta el Perú” que se transmitía por Radio Nacional, y también los programas televisivos “Así nació mi canción” y “Fina Estampa”. Además publicó dos libros: Poeta de la canción y Canciones de Juan Mosto, y fue reconocido por el Gobierno Peruano con las Palmas Magisteriales Artísticas, en el Grado de Maestro Distinguido.