Un punto en común

A un par de meses de culminar este año, me pregunto ¿cómo encontraremos al Perú el 2021? ¿Será acaso un país más pobre? Si ese fuera el caso, lamentablemente, creo que tendríamos que reflexionar acerca de qué acciones llevaron a nuestro país al estado en que se encuentra ahora. 

Salgo a la calle, recorro algunos lugares de la ciudad de Lima y me encuentro con hombres y mujeres que diariamente tienen que buscar sustento para sus hogares. Los niños, con o sin mascarillas, trabajan al lado de sus padres, ofrecen caramelos en las veredas. Una trabajadora sexual con mascarilla en una esquina. En la vereda de enfrente, una mujer con un letrero de cartón en su cuello: “Tengo hambre”. Más allá, un hombre durmiendo en su casa de cartón, mientras los autos pasan de largo por las pistas. 

Créanme que me entristece mucho ver de esta manera a mi país. Un amigo, a quien le contaba todo esto, me decía: los únicos que se preocupan por lo que pasa parece que somos nosotros, porque a aquellos que viven del enfrentamiento entre peruanos, como hemos visto en estos últimos años, no les interesa el país. Nosotros, y seguramente muy poca gente, somos los únicos “locos” que vivimos pensando en cómo contribuir con la solución a estos problemas. 

El otro día, escuchando y leyendo sobre las elecciones en Estados Unidos, vino a mi mente la novela de un escritor norteamericano, John Steinbeck: Las uvas de la ira. En la escena final, una joven termina dando de lactar a un extraño, un hombre viejo, pobre y hambriento que, a decir del niño que estaba a su lado, “si no come algo pronto, se muere”. La joven se levanta, se descubre el pecho y el resto queda a imaginación del lector. 

Y recordaba, precisamente, este pasaje literario porque aquellos que no somos economistas, sociólogos, ingenieros, educadores... nosotros, los escritores, creo que estamos llamados a reflejar esta situación en nuestros cuentos, novelas y poemas. Y quizás al mirarnos en ese espejo podríamos tratar al menos de entender qué nos pasó, cómo fue que llegamos a este punto de nuestra historia. 

Yo creo que nos reímos y hasta despreciamos a la política como el arte del entendimiento, y ese fue un error. ¿Cómo será el Perú del 2021, sin políticos con experiencia? ¿Sin políticos de polendas? 

Haya de la Torre, en una entrevista, decía que el problema en nuestro país era la falta de entendimiento debido a la falta de educación política. Claro, si en verdad nuestra gente leyera más, entonces encontrarían soluciones comunes para problemas comunes. Lamentablemente, puede que muchos sepan leer y escribir, pero eso no asegura que lean más de un libro al año. ¿Cómo lograríamos, entonces, que se pusieran de acuerdo un ex futbolista, un ex militar, un ex cura, y otros hombres y mujeres que han recibido formaciones distintas y que hoy aparecen en la foto del momento, de cara al 2021? ¿Cómo encontraríamos un punto en común? 

Yo hago lo mío: escribir. Es lo que me hace feliz, me hace libre. Por el bien de nuestro país, espero que el próximo año haya un mayor entendimiento entre nosotros. Desde la manera en que yo veo las cosas, eso dependerá en gran medida de ponernos a leer más.