Luis Cáceres Álvarez

Otra manera de narrar

Otra manera de narrar
Luis Cáceres Álvarez
11 de noviembre del 2016

Más información sobre la fotografía de ensayo periodístico

“En el principio era el verbo, y el verbo estaba con Dios. Y el verbo era Dios”, señala el Evangelio de San Juan. Un foto-periodista captura verbos. Suena simple, pero no lo es. Se consiguen acciones, procesos, estados o existencias para contar caos y éxitos de una sociedad. Identidad, memoria, tiempo y espacio aparecen y deben transmitirse sin ser trastocados.

El 15 de octubre de 1978 falleció Eugene Smith, un maestro del ensayo fotográfico con trabajos como The Country Doctor (1948), La villa española (1950), Minamata (1971-1975), entre otros. Smith, “el fotógrafo de la oscuridad” cumpliría 98 años el 30 de diciembre. Su vida estuvo marcada por la previsualización de situaciones, luces y sombras, el orden de las líneas y figuras que enfocó; pero también del análisis para presentar el mejor encuadre.

Pero ¿qué es el ensayo fotográfico? Quizá la comparación más acertada sea con “la escritura de una pieza teatral” porque cada fotografía se coloca en relación con las demás. “Se trabaja sobre las relaciones entre las personas. Se examinan las relaciones que se han hecho, y se ve si deben ser establecidas o reforzadas otras relaciones”, afirmaba Smith.

Arte que muestra profundas reflexiones. Un híbrido: el ensayo fotográfico expresa opiniones y documenta. De esta forma, se crea una metáfora. La investigación y el análisis están acompañados de las emociones, las llamadas a la acción para llegar a un punto de equilibrio en el inicio, el nudo y el desenlace. ¿En quiénes pensaba Smith al hacer su trabajo? ¿Qué perseguía al retratar determinado instante? Preguntas básicas para conocerlo y a su obra.

Pienso que debe haber persistencia, tener un punto de vista central y jamás salir de una situación sin las manos vacías. Hace dos meses escribí sobre “el ojo del fotógrafo” (http://bit.ly/2dnrsUU) y la pesca, la caza o la captura de esencias, tanto de personajes como de espacios, para marcar en la mente de los espectadores. Para Vera Lentz, una leyenda del fotoperiodismo peruano, por pasar de conflicto a conflicto en los años más duros del país, “no es un trabajo glamoroso. Y siempre se espera que todo el tiempo uno esté en servicio. Se aprende en la calle. No hay atajos”. Henri Cartier-Bresson sostenía que se requiere concentración, sensibilidad y un sentido de la geometría para desarrollar claridad con el mayor respeto por el tema y por uno mismo. 

La brasileña Adriana Zehbrauskas, fotorreportera de The New York Times parafraseando a Susan Meiselas, miembro de la Agencia Magnum, asevera que no se llega a determinado lugar con una visión, sino más bien con una interrogación. “Llegas con la pregunta de qué va a pasar. Escuchas la historia y dejas que la historia te lleve”.

Sorprende la mínima información que hay sobre este género. Espero que estas pinceladas ayuden a comprenderlo un poco más tanto para su lectura como para su producción. 

 

Por: Luis Cáceres Álvarez

Fotografía: Tomoko Uemura in her bath. Minamata, Japan December 1971. By W. Eugene Smith.

 
Luis Cáceres Álvarez
11 de noviembre del 2016

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