Iván Arenas

¿Le tiende el gobierno una trampa al fujimorismo?

¿Le tiende el gobierno una trampa al fujimorismo?
Iván Arenas
26 de abril del 2017

La excarcelación de AF como ficha de cambio

La declaración del presidente Pedro Pablo Kuczynski sobre que el Gobierno estudia una posible excarcelación del ex presidente Alberto Fujimori de alguna u otra manera ha removido el escenario político. Carlos Bruce y otras personalidades del pepekausismo también declararon a favor de una posible excarcelación, y entonces empezaron a surgir hipótesis de cuál sería el marco legal que se utilizaría para que Fujimori abandone la prisión. No obstante, las insinuaciones pepekausas no fueron bien recibidas en la tienda naranja porque se entiende que se está utilizando el caso políticamente.

¿Qué hay detrás de esta iniciativa que desde el pepekausismo se ha comenzado a desplegar? Aunque algunos hayan visto un honesto acercamiento del gobierno a la oposición, todo indica que se trataría de un globo de ensayo, de una estrategia para medir la unidad, la capacidad de respuesta y la colocación del fujimorismo. Valgan verdades, si el gobierno pepekausa tuviera la voluntad de excarcelar a Alberto Fujimori no habría comenzado a desplegar la idea en los medios de comunicación. Al contrario, habría empezado por comunicarse con la familia de manera directa y personal. Es decir, se habría empezado a negociar un acuerdo, de frente y sin dudas.

¿Por qué el gobierno pepekausa empieza a desplegar la idea en el contexto de la discusión de la Ley de la Reconstrucción? Por una sencilla razón: se quiso presionar al fujimorismo para que aprobara la ley, y para ello se utilizó la posible excarcelación de Alberto Fujimori como una ficha de cambio.

Ahora bien, si seguimos suponiendo que en el gobierno existe una masa gris pensante hay otros hechos que pueden corroborar la estrategia pepekausa. Por ejemplo, resulta bastante sugerente que el gobierno haya empezado a desplegar la idea de la excarcelación luego de que Keiko Fujimori participara, junto a PPK, en la ceremonia por los héroes de la Operación Chavín de Huántar. En la lógica del gobierno pepekausa y sus estrategas, este sería el momento perfecto para desubicar más a un fujimorismo que en las últimas semanas no ha tenido un buena performance. De hecho, que en la ceremonia PPK se refiera a Keiko como "la hija de Alberto" dice mucho.

Vale observar que varios hechos marcaron una semana trágica para el cuadro naranja, entre ellos una endeble respuesta de unidad nacional frente al caos de los huaicos y lluvias, la insistencia en la presentación de un proyecto de ley sobre medios de comunicación, un comentario insultante sobre el Alzheimer y una aparente disputa entre Kenji y Keiko, por ver quién le saca mayor brillo al el apellido Fujimori.

Una de las claves en la guerra, como en la política, es descolocar al adversario con una jugada de posiciones. Como en el ajedrez, gana quien tiene la iniciativa. El pepekausismo ha entendido que en la política todo vale; incluso desplegar un posible indulto al ex presidente (si se lo merece o no es harina de otro costal) Aquí no hay nada santo y poco importa la salud de Alberto Fujimori. Por el momento es solo una pieza negociable. 

Iván Arenas

Iván Arenas
26 de abril del 2017

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