El pasado 21 de octubre, el abogado y escritor Gary Marroquín M...
Sobre la escenificación del vía crucis del “Cristo Cholo”
Este editorial fotoperiodístico mostrará, líneas abajo, un recorrido del cual todos hablan y que un mar de gente visita cada año, durante estas fechas religiosas, en Lima. Porque el hijo de Dios es peruano, se ha logrado plasmar instantes en los que la dureza y la fragilidad conviven; así como la reflexión y la búsqueda de seguridades espirituales. Todo ello a través de la crucifixión del “Cristo Cholo”, que desde el 2015 se lleva a cabo en el Paseo de Aguas del distrito del Rímac (antes se realizaba en el cerro San Cristóbal). Exuberancia del rito y la festividad popular.
¿Cuál es la motivación de Julio Mario Valencia Rivadeneyra para recorrer varios kilómetros cargando una cruz de 90 kilos y prepararse, tanto física como espiritualmente, desde cuatro meses antes? ¿Seguir por más de treinta años? En la siguiente propuesta visual no solo se muestra su sacrificio, sino también lo que ocurre alrededor.
Todo evento religioso católico ha pasado a formar parte de la cultura del Perú; no decimos que sea bueno o malo, pero seguro perfila el temperamento de la esfera pública nacional. Y quizá haya un fanatismo al querer estar conectados “virtualmente”.
Gracias al testimonio del reportaje, a la memoria documentada y al arte, las fotografías de los ritos muestran a personajes en momentos de gran concentración, de tránsito por lugares en los que el tiempo parece detenido, y al interior de un mundo con su propio simbolismo: las actitudes, las miradas y los gestos conforman el catálogo de una fe que, literalmente, mueve una montaña. Miren y comenten.
Fotografías: Luis Cáceres Álvarez
COMENTARIOS