Arturo Valverde

Todo a un tiempo

Sobre la novela “Los hermanos Karamazov”(1880), F. Dostoievski

Todo a un tiempo
Arturo Valverde
04 de junio del 2024


Querida hermana:

Vuelvo a leer a Dostoievski después de un tiempo y me encuentro ahora ante la descripción del primer matrimonio de Fiódor Pávlovich Karamázov con Adelaida Ivánovna, ambos personajes de la novela Los hermanos Karamázov (Penguin Random House, 2023).

He leído con emoción hasta cuatro o cinco veces el primer capítulo con un lápiz en la mano, admirando como en cuatro páginas el escritor ruso describe la personalidad del tal Fiódor Pávlovich, y uno empieza a sentir cierto rechazo por su “vocación” y “aficiones de parásito”, que caracterizan principalmente a este sujeto.

Me quedé repasando en silencio la comparación entre la situación de Adelaida con el caso de una “muchacha de pasada generación romántica que después de algunos años de enigmático amor a cierto caballero… murió víctima de su propio capricho…”. ¿Era necesario citar aquel ejemplo para describir la condición de Adelaida? La intención es clara, endosarle el mismo sufrimiento a Adelaida. 

En adelante, asistimos a la tragedia de Adelaida, porque lo que vive con ese hombre, Fiódor Pávlovich, es un desastre, es la ruina de su vida. “Se contaba que la joven esposa se mostró incomparablemente más noble y de mayor alteza de miras que Fiódor Pávlovich, quien, según ahora se sabe, le sacó inmediatamente, de un golpe, los veinticinco mil rublos que acababa de recibir, de tal manera que aquello fue como si te he visto no me acuerdo”, escribe Dostoievski.

Solo unos rasgos nos aproximan a Adelaida, a quien el autor la describe como impulsiva, arriscada, morena, de poca paciencia y dotada de notable fuerza física. Sin embargo, lo que más llama mi atención es la última parte de este primer capítulo. Dostoievski presenta dos versiones sobre la reacción de Fiódor Pávlovich cuando se entera de la muerte de Adelaida. Me he preguntado repetidas veces, ¿con qué propósito? Y, además, que esas versiones las pone en boca de otros testigos, el autor se aparta ligeramente, generando un ambiente de intriga y sospecha alrededor de ese importante momento en la vida de Fiódor. 

De otro lado, creo que, al contar ambas versiones, le imprime cierto realismo. Una primera versión dice: “Cuando Fiódor Pávlovich supo la muerte de su esposa, estaba borracho perdido; según dicen, salió a la calle y empezó a gritar, levantando los brazos con gran contento: Ya estoy libre”.

Una segunda versión dice: “Según otros rompió a llorar desconsoladamente, como un niño pequeño, hasta tal punto que, añaden, causaba pena verlo, a pesar de la repugnancia que despertaba”.

Unas líneas después, Dostoievski interviene añadiendo: “Es posible que ocurriese lo uno y lo otro, que se alegrase de su liberación y llorase por su libertadora, todo a un tiempo”. ¡Qué precisa esas últimas palabras! “Todo a un tiempo”.

Te ruego que tomes mis comentarios como las impresiones de un escritor que disfruta leyendo a otros escritores. Jamás me atrevería a asumir la pose o actitud de un literato experto en los clásicos universales. Solo creo que, quienes escribimos vemos la literatura de una manera más íntima y cálida; buscamos otras pistas entre líneas. Leemos para tratar de aprender a escribir mejor.

Arturo Valverde
04 de junio del 2024

NOTICIAS RELACIONADAS >

El mismo cuento, con todo gusto

Columnas

El mismo cuento, con todo gusto

A don Miguel le parece que una historia, cuando es original, cuando es...

24 de septiembre
Vi un molino

Columnas

Vi un molino

Don Miguel, eso de creerse caballero andante por andar leyendo libros ...

17 de septiembre
El génesis de Don Quijote de la Mancha

Columnas

El génesis de Don Quijote de la Mancha

Don Miguel, el primer capítulo de su célebre novela Don ...

10 de septiembre

COMENTARIOS