PROTESTA POPULAR E INVERSIONES

Qué duda cabe de la legitimidad y justeza de los reclamos sociales que buscan mejorar los ingresos de los maestros, médicos, Policía Nacional, Fuerzas Armadas, Poder Judicial, etc.; pero, no se podrá otorgar mayores aumentos si previamente no se incrementa la recaudación fiscal.

Como sabemos, los ingresos del Estado corren la suerte de la expansión económica, si el Producto Bruto Interno crece de manera significativa, superior a 3.5% -aproximadamente-, la pobreza no se incrementa, pero tampoco se reduce.  Se necesita que la economía vuelva a crecer por encima de 5% anual para que en los próximos dos o tres años se sienta que la pobreza disminuye, que aumenta la generación de empleo, que el consumo de las familias sube y, por tanto, el Estado recauda más y puede atender la justa demanda de varios sectores sociales.

Si no se propicia la generación de más ingresos no debería gastarse más.  Algunos dirán que en el pasado sí se hizo, efectivamente, pero la consecuencia de un gasto superior a los ingresos del Estado surte el mismo efecto que en una familia, termina endeudándose o auto engañándose.  En los años 70 y 80 del siglo pasado, el Estado gastó más y cubrió el mayor gasto a través de la emisión inorgánica de la moneda nacional, el resultado fue que tras poco más de dos décadas, los salarios promedio de todo el país se redujeron en 50% y el de los profesores a una fracción de lo que recibían en los años 60.  

Cuando se estabiliza la economía y se emprende el crecimiento es que los salarios de muchos sectores se empiezan a incrementar, la lógica responde al conocimiento popular, “Del cuero salen las correas” o lo que es lo mismo, sin crecimiento no habrá mayores ingresos.  La redistribución de los ingresos del Estado es una opción válida sólo a partir del crecimiento económico, donde las autoridades pueden otorgar una mayor asignación a los sectores cuyos salarios se encuentran rezagados, pero disminuir los ingresos de unos para otorgárselos a otros es “Como desvestir a un Santo para vestir a otro”.

¿Cómo se logra mayor crecimiento económico?

Promoviendo y estimulando la inversión. ¿Cuál es nuestra principal fortaleza para atraer inversiones? la actividad minera, el mayor volumen de inversión se orienta hacia dicho sector.  La razón es el vasto potencial geológico de nuestro territorio que debemos convertirlo en riqueza económica para financiar, por ejemplo, mejores salarios que  como contraprestación esperan una mejora de los rendimientos.  Si se tratase de los profesores, estudiantes más capacitados para proporcionarles mayores y mejores herramientas para superar la pobreza intergeneracional.  Si se tratase de los profesionales dedicados a la prevención y cuidado de la salud, un mayor grado de satisfacción de los pacientes, y así sucesivamente.  Es decir, reconocimiento y estímulo a la meritocracia.

Facilitar la inversión de ingentes volúmenes de capital, sólo en el sector minero, podría representar una inversión de $49 mil millones de dólares durante los próximos cinco años.  Además, generación de puestos de trabajo descentralizado, un aporte económico significativo a distritos y provincias generalmente ubicadas en zonas alejadas de los centros urbanos y con altos niveles de pobreza y pobreza extrema, principalmente en el ámbito rural.

¡Qué estamos esperando para disminuir los niveles de conflictividad e incrementar los niveles de satisfacción social!