Juan Carlos Valdivia

Primero el interés nacional

Primero el interés nacional
Juan Carlos Valdivia
09 de marzo del 2015

¿Los rencores de Humala han prevalecido sobre la conducción de la política exterior? 

El desvelamiento de una operación de espionaje que desde hace varios años viene llevando el estado chileno en el Perú ha generado el rechazo unánime. Es una violación a todos los esfuerzos llevados adelante en los últimos años para generar confianza entre ambos países en el marco del proceso de La Haya. Chile ha actuado de manera sibilina, organizando reuniones a donde asistían políticos, empresarios, líderes de opinión y periodistas, mientras sobornaba a traidores para que le entreguen información. No ha respondido a la lealtad con la que nuestro país asumió el proceso en La Haya. 

En situaciones como esta, en la que entran en conflicto los intereses nacionales, hay quienes no logran entender cuáles son sus verdaderas prioridades. Ahí están los políticos que pueden pretender obtener réditos cuestionando la conducción de la política internacional, a cargo del Presidente de la República, y haciéndole el juego a los intereses fuera del Perú. Situación similar puede producirse cuando ciertos medios creen que la libertad de prensa está por encima de los intereses nacionales. 

Hace algunos años, un debate similar se generó cuando un diario decidió publicar, como si denunciara un acto irregular, que las Fuerzas Armadas estaban construyendo túneles para ingresar a la Embajada de Japón, que había sido tomada por asalto por terroristas. Se hizo mal al delatar los planes de las fuerzas armadas pues esa información que pudo frustrar un operativo que luego fue exitoso. En el caso de los espías chilenos, se sabe que la Marina buscó que la información no fuera publicada por una televisora local. La televisora decidió publicar. Fue mayor su interés en difundir una primicia que en actuar de acuerdo a lo que los intereses nacionales aconsejaban. Y aquí entran otras consideraciones: ¿Quién tomó la decisión en el canal? ¿El gerente boliviano o la directora de prensa colombiana? 

Cualquier conflicto con Chile siempre tendrá observadores felices en el balcón. La historia ya nos enseñó eso. Países que tienen disputas con Chile verían con agrado que se le abrieran nuevos frentes al país del sur. 

Pero también cierto es que si los peruanos estamos dispuestos a dejar en manos del Presidente la conducción de la política internacional, lo hacemos en el entendido que, siendo quien representa a la nación, actuará en defensa de los intereses nacionales. Lamentablemente, en los últimos días, al enfrentarse con el diario El Comercio, solo ha hecho que sus rencores personales se superpongan a la conducción de la política internacional. Pues si bien hay quienes podemos opinar que El Comercio se equivocó al deslizar enfrentamientos entre Torre Tagle y Palacio de Gobierno, información que le hacía un favor a la argumentación chilena, el Presidente se equivocó al no separar sus confrontaciones por problemas internos con este que afecta nuestras relaciones internacionales. Y se exageró desde el Congreso, cuando la bancada oficialista lanzó amenazas que parecían dirigidas a Chile, pero en realidad buscaban atacar al grupo empresarial El Comercio. Le faltó talla de estadista, para resolver en privado cualquier cuestionamiento a la línea editorial de El Comercio. 

En estos temas, donde el interés nacional está en juego, hay que respaldar al Presidente de la República y permitir que este actúe con prudencia pero con firmeza en defensa de la nación. Ya tendremos el momento para evaluar su gestión. Pero este no es ese momento. 

Por Juan Carlos Valdivia
07 - Mar - 2015  

Juan Carlos Valdivia
09 de marzo del 2015

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