Manuel Bernales Alvarado
O Fortuna, Imperatrix mundi
Sobre la renuncia del presidente del Consejo de Ministros
A mitad del Día Internacional de las Naciones Unidas que conmemora a la Mujer (*), la noticia de la renuncia del Presidente del Consejo de Ministros, usual y erróneamente llamado Premier, sin conocerse la carta que dirigió al Presidente, ocupa casi todo el espacio noticioso. Todo puede ser en el Perú de hoy y de mañana. El Día de la Mujer prácticamente pasó a segundo o tercer plano.
Hace menos de un dia, en plática muy fluida, seria y con argumentos, no consignas, con políticos y académicos, en su mayoría críticos militantes contra el sistema imperante en el Perú, se expresaba que la lucha contra los corruptos que han sido puestos en la picota pública debe seguir sin dilación, para que puedan tener andadura reformas del sistema electoral y, más pronto que tarde, de la Constitución. Esta lucha, señalaba el principal documentado contertulio, no ha hecho olvidar quiénes son los hasta hoy incólumes y otros beneficiados de la fortuna, mostrando El Comercio datos actualizados al 25.02.2019.
https://especiales.pe/?g=especialdes/los-peruanos-del-lavajato/index.html,
Investigaciones como la del fallecido historiador Alfonso Quiroz Norris, Historia de la corrupción en el Perú, completan el cuadro estructural, histórico, de conjunto, de corruptos, corruptores y corrompidos en perspectiva de larga duración. Un panorama más completo comprendería una historia, diagnóstico y pronóstico del narcopoder y de la ilegalidad como pauta, modo de ser y hacer. En un Estado medianamente constituído esto sería, lo fue en el Perú, una tarea de inteligencia estratégica esencial para toma de decisiones correctivas, bajo responsabilidad, una vez aprobadas o asumidas por la Presidencia de la República. Así lo hicimos en la primera Escuela de Inteligencia Nacional (ESIN).
El día a día forma parte de una sociedad política casi destruida, donde hay partidos como cancha, vientres de alquiler por doquier, elegidos sin requisitos de las propias leyes mediocres, varones y mujeres tolerados o blindados para la preservación de las redes de abuso, mediocridad y corrupción evidentes. Se ha logrado, con ayuda de una mala prensa, nacional, departamental, llamada regional, local y de redes electrónicas llamadas sociales, multiplicada por una defectiva educación del pueblo, que predomine el instante de protesta, el yoquepierdismo y el todo vale, solo hay que "saberla hacer".
Aún así, llama la atención a mis colegas funcionarios y consultores internacionales, que el Perú avance en la lucha contra la corrupción, que el derrumbe que ansiaban los senderistas o similares no se haya producido y que las cifras del crecimiento económico sean mayores que en otros Estados del continente. Sin embargo hasta el World Economic Forum, el BID o la CEPAL, por ejemplo, no cesan de recordarnos que, aunque se haya reducido la pobreza, en particular la medida por ingreso monetario, en verdad una ridiculez, en un Perú informalizado, la desigualdad monetaria, real y las dimensiones del poder y la autoridad han crecido.
El malhadado dicho “Dios es peruano”, me recuerda a la diosa Fortuna y al hecho de que amigos moqueguanos me insisten en que la Imperatrix Mundi, que Carl Orff creó en el pentagrama, es la estrella del señor presidente de la República. Hay quienes semanalmente hacen noticia con la bajada de popularidad del presidente y de su presidente del Consejo de Ministros, (¡hasta en una sala de la PCM hay una galería de premieres, título heredado de los dos gobiernos militares que sí los tuvieron por ley!). Sin embargo esa positiva opinión es alta y notablemente positiva pese a los evidentes rezagos y déficits de realizaciones en temas clave y en departamentos, provincias y distritos muy afectados, tanto o más por malas prácticas o absoluta ausencia de buenas políticas públicas efectivas en acondicionamiento del territorio, que por efectos de la naturaleza, por demás conocidos desde la época preinca, que se pueden observar sin intermediarios ni interpretaciones.
¿Recuerdan los índices de popularidad de Toledo, García y Humala? ¡No pasó nada! Terminaron sus mandatos. Hubo cosas buenas que algunos fans recuerdan más que los millones de pobres, más aún en un Perú cuya memoria vigente es de los noventa en adelante, salvo para culpar al gobierno de Velasco y al primero de García de todos los males del país, lo que evidentemente no es verdad.
Sectores llamados liberales reiteran el estatismo de decisiones del Poder Ejecutivo. Son meras intervenciones que nunca han cuestionado el orden amparado por la Constitución vigente, que se defiende a troche y moche. No obstante existe data de que en período fundacional de Alberto Fujimori y Vladimiro Montesinos, si bien se vendió el patrimonio del Estado, como dicen en América Central, a precio de gallo muerto, y se dio paso a la libre acción de agentes privados del maltrecho mercado, el PBI subió y ¡luego bajó!
Este intervencionismo de Estado sin efectivo plan de país, es decir, autocentrado, no descentrado ni hipotecado —no hablo de papeles, éstos sobran y justifican ritos burocráticos, relaciones internas y externas, salarios y honorarios— ha aprovechado oportunidades del mercado mundial de materias primas, sin duda, e impulsado exportaciones agrícolas no tradicionales, con un aporte que pagamos todos los contribuyentes o ¿acaso nos regalan la tierra labrantía y el agua?
Bueno es insistir que nos falta un cuadro de conjunto financiero y del mundo de conexiones reales del Lava Jato y otras corrupciones. Se levante o no esa información, es improbable que afecte la popularidad del presidente. Lo que denomino el combo sicosocial o si quieren información y comunicación pública gubernamental y privada dominantes, corren en su favor. Esto y un manejo afortunado de situaciones como el viaje en misión de Estado a España, que recién hoy el canciller explica al país, no han desfavorecido la estrella presidencial. Para parafrasear a M. Porter o J. Kim, Vizcarra no es hoy una estrella menguante. Sus posibilidades de lograr buenos resultados, sostenibles, durables, en pocos temas clave, se mantienen, aunque el tiempo va en desfavor: ¡Tempus fugit! viene la Cuaresma, la Semana Santa y pronto un inédito y tal vez demencial período electoral, con toda transparencia.
Este respaldo de la fortuna, para no pocos un show que va a continuar, aunado a su vigor y cumplimiento de una de las reglas claves de la comunicación y propaganda política, la reiteración, sobre todo en la dimensión social atrayente contra la corrupción, hace que tenga más responsabilidad política y moral ante el país de hoy y del mañana. Gustaba decir a mi padre, "obras son amores y no buenas razones"....y muchos repiten el lema romano, que fué el de Odría, un intervencionista en su época, ¡hechos, no palabras!, res, non verba.
Los temas o problemas clave no han variado. Con el tiempo, empeoran. Sí, cambiará el Consejo de Ministros, con o sin paridad de varones y mujeres, mediando interpretación criolla aritmética de igualdad de derechos entre varones y mujeres, que se le llama comúnmente igualdad de género. Las políticas internacionales para la justicia y equidad, promueven la igualdad en las reglas y condiciones de existencia entre varones y mujeres. Ante lo evidente e inhumano de la subordinación desventajosa de la mujer, se construyen políticas llamadas de discriminación positiva es decir en neto favor de la mujer o de grupos y segmentos en desventaja social.
Somos humanos iguales en esencia y dignidad, somos personas y esta noción con base laica natural o religiosa es el centro y esencia del derecho y las políticas de desarrollo y seguridad humana. Han sido y son materia esencial de mi trabajo desde el colegio, curso de Educación Cívica, y, ya en la universidad, el gremialismo estudiantil y la vida política y profesional desde los sesenta.
*http://www.unesco.org/new/es/unesco/events/prizes-and-celebrations/celebrations/international-days/
El Día Internacional de la Mujer de las Naciones Unidas, enriqueció rápidamente su contenido práctico y legal al punto en que hoy, algunos sectores, asocian casi mecánicamente con reivindicaciones de grupos de personas LBTGI y menos con dimensiones históricas de derechos políticos, económicos, culturales e ideológicos y de compensación de desventajas sociales por causa de pobreza, religión, guerras, violencia, identidad étnica o nacional y aun con impactos del cambio climático. Ver:
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