Las mentiras del preso Castillo

El 7 de febrero, a los dos meses del golpe de Estado perpetrado por el vacado expresidente Castillo, apareció en internet una entrevista que Castillo concedió a un “medio digital” español de nombre El Salto, que más bien es un panfleto virtual que realmente representa a la izquierda más radical en España.

El Salto, como cualquier panfleto de la ultra izquierda, miente descaradamente porque el vacado y hoy preso Castillo Terrones no es Presidente Constitucional de la República del Perú, porque el 7 de diciembre del 2022 –de manera televisada– cometió el mayor delito contra el Estado que es la sedición, por lo cual tiene 18 meses de prisión preventiva. Además el Parlamento –primer poder del Estado porque en él y solo en él reside la soberanía nacional– lo vacó ante tal felonía jurídica, y juramentó como Presidente a la entonces vicepresidente Dina Boluarte. Lo repito tajantemente: aquí el único golpe de Estado perpetrado fue por el preso Castillo. A pesar de todas las deficiencias del Estado, en el Perú hay una democracia representativa, imperfecta sí, pero que ha funcionado porque se respetó el orden como la sucesión constitucional. 

Indudablemente, si leemos todo lo publicado por El Salto podemos darnos cuenta de que, como especialistas en la mentira –por eso son buenos discípulos del comunista alemán Willi Munzenberg, asesinado por órdenes del dictador soviético Stalin– esta “entrevista” es un maquillaje sutil a los delitos cometidos por Castillo Terrones además es un espacio que lamentablemente le ha servido para victimizarse con el maniqueísmo que “no se le dejó gobernar porque era un humilde profesor de los Andes”, lo cual es una –valga la redundancia– enorme mentira porque los ciudadanos que siempre hemos sido de oposición lo hemos criticado por su absoluta incapacidad en la gestión pública como por sus actos de corrupción.

No debemos olvidar las visitas nocturnas a la casa de Sarratea, los US$ 20,000.00 encontrados en el baño de Palacio de Gobierno, los negociados en el Ministerio de Transporte por la cual el ex ministro Silva está prófugo de la justicia y reside cobardemente en la Venezuela socialista de Maduro, sumado a los negociados perpetrados por los sobrinos y la cuñada –que usando su cercanía al entonces mandatario Castillo– intercambiaron favores por dinero y las declaraciones de Salatiel Marrufo, ex asesor del Ministerio de Vivienda y Construcción– que afirmaba tajantemente que las coimas fueron directamente al preso Castillo Terrones.

La administración de Castillo Terrones estuvo repleta de ineficientes y de corruptos confesos por eso todo lo dicho por “El Salto” debe ser repudiado abiertamente porque es la clara demostración de como un medio de comunicación privado quiere manipular -en base a mentiras- a las sociedades española y peruana respecto a las corruptelas del hoy preso Castillo Terrones.