Giacomo Ugarelli

La oportunidad del Dragón

La oportunidad del Dragón
Giacomo Ugarelli
30 de noviembre del 2016

China pone las reglas del juego a partir de APEC

Hace una semana, el Perú fue sede por segunda vez en su historia de la Cumbre de Líderes de APEC, recibiendo a todas las economías (así se definen a los países en este foro) para su 24 edición. Fue un gran éxito. La celebridad más notoria del foro fue sin duda Barack Obama (por quién las universidades peruanas se peleaban para recibirlo en sus sedes), pero los protagonistas principales y con vista al futuro eran el presidente chino, Xi Jinping, y el fantasma de Trump. El fantasma de Trump, porque a pesar de no estar en la lista de invitados, todos los líderes (así se refieren a los jefes de Estado en APEC) y empresarios hablaron, de una manera, u otra del próximo presidente norteamericano en todos los discursos, con un tono de preocupación y pesimismo.

Durante la carrera electoral, Trump expresó su rechazo al TPP (El Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica) y amenazó a México y China con el establecimiento de barreras proteccionistas, hasta en un 45%, para proteger los trabajos de los norteamericanos. Obama ha intentado levantar el ánimo de los países socios, diciendo que no lleguen a conclusiones sin haberle dado a Trump la oportunidad de gobernar. Este discurso tal vez motivador, como la mayoría de los de Obama, fue poco convincente y no calmó los temores de su patio trasero. Trump tiene la vocación, el derecho legítimo y las herramientas para cumplir con sus promesas. El Congreso por ejemplo, está actualmente (y al menos hasta el 2018) controlado por una mayoría republicana, y todos aquellos representantes republicanos declarados anti-Trump —como Paul Ryan y Mitt Romney, al que se rumorea como posible secretario de Estado— poco a poco han cambiado de camiseta, subiéndose al carro del nuevo presidente electo. Ahora, si Trump hace lo que prometió, ¿a quien le convendría? La respuesta es ¡a China!

En la última década China le ha robado el puesto a Estados Unidos como el principal socio comercial para los latinoamericanos. Si comparamos a Obama con Xi Jinping, podemos comprobar que China está ganando la partida. Xi Jinping ha visitado la región el mismo número de veces que Obama, pero la diferencia es que Obama asumió la presidencia en el 2008 y Xi Jinping recién en el 2013. Antes de llegar al Perú, el mandatario chino visitó Ecuador, se quedó unos días más en Lima para hablar con PPK y paró en Chile antes de regresar a Beijing.

En el simpático discurso de Xi Jinping —en el que confesó que le gusta el camote peruano—, el mandatario se refirió indirectamente a Trump, concordando en que el proteccionismo era el mayor enemigo del crecimiento global. Los miembros de la APEC salieron de la Cumbre con dos alternativas: el FTAAP (un TPP incluyendo a todos los países de la región), que Trump no aprobaría si ya está rechazando el TPP (y este último incluye a China), y el RCEP (Regional Comprehensive Economic Partnership), interesante acuerdo de libre comercio que excluye a Estados Unidos e incluye a la India.

Resulta incierto si el “presidente Trump” será diferente al “candidato Trump”. Lo que sí es seguro es que los miedos y desconfianzas hacia Trump benefician al gigante asiático, ya que los demás países lo mirarán como un garante de la estabilidad. China y Estados Unidos compiten a diario por influencia alrededor del mundo. El TPP era una estrategia comercial de Obama para mantener a los países del Asia Pacífico bajo la órbita comercial de Washington, estratégicamente excluyendo a Beijing para quitarle espacios. Pero ahora que Trump dice romper con este tratado, China tiene la oportunidad de quitarle la cancha a Estados Unidos. Como dijo hace cientos de años el famoso estratega chino, Sun Tzu: “El supremo arte de la guerra es someter al enemigo sin luchar”. China no se aparta de los sabios consejos de sus ancestros.

 

Por Giacomo Ugarelli

MSc International Public Policy - University College London, profesor de Análisis Internacional UPC

Giacomo Ugarelli
30 de noviembre del 2016

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