Guillermo Vidalón

Cuarentena y los cantos de sirena

Es tiempo de reactivar la economía

Cuarentena y los cantos de sirena
Guillermo Vidalón
05 de mayo del 2020


“Más vale tarde que nunca” reza el dicho popular. Lo cierto es que el Gobierno recién parece percatarse que la cuarentena improductiva ha llevado a millones de peruanos a la pobreza y pobreza extrema, dado el quiebre de miles de micro, pequeñas y medianas empresas. El desempleo se ha incrementado vertiginosamente y con ello la pérdida de sustento económico para miles y, quizás, millones de familias, quienes se ven ante la posibilidad de morir de hambre impedidos de trabajar o morir contagiados por el Covid-19.

Desde que la pandemia del coronavirus manifestó su presencia en el país expresamos que la mejor manera de enfrentarla era mediante el aislamiento productivo. Es decir, replicar las condiciones de aislamiento social y mantener –en la medida de lo posible– los niveles de productividad. La cifra de contagiados y fallecidos da trancos mayores y las medidas del Gobierno, como se suele decir, “hacen agua”. No podía ser de otra manera en un país donde la informalidad comprende al 70% de la población. No había manera de mantenerlos en casa si no se les aseguraba –al menos– el sustento diario. 

Proponer el bono económico como alternativa trajo como consecuencia el incremento de las colas para acudir a los bancos y, posteriormente, a los mercados para adquirir productos de primera necesidad. ¿Qué sucedió?, los mercados y los bancos se convirtieron en focos infecciosos, sea porque quien atiende se contagió y se enteró luego de los 14 días, o también porque algún cliente acudió en las mismas condiciones. Lo cierto es que hay centros de abastos en los que se aplicó la prueba rápida y el resultado fue que 40% ciento de los comerciantes dieron positivo a la prueba serológica.

Afortunadamente, el Gobierno parece haber entendido que no será posible seguir alargando la cuarentena. Es tiempo de reactivar la economía, y el riesgo de no hacerlo será peor, porque las personas buscarán sobrevivir, tal como ya lo están haciendo miles de ciudadanos que buscan retornar a sus lugares de origen.

¿Qué hacer? Privilegiar el transporte en bicicleta. El transporte público masivo en ómnibus ya no es el más seguro ni su servicio el más eficiente. Se carece de las unidades necesarias para garantizar un servicio oportuno y con el indispensable distanciamiento social. Se requiere garantizar que el personal de salud se aloje en un lugar cercano a los centros hospitalarios, de esta manera se evita los inconvenientes que enfrentan para trasladarse a sus viviendas. En estos casos habrá que organizar turnos de trabajo más extendidos y garantizar que ellos guarden cuarentena antes de que retornen a reencontrarse con sus familias: menos estrés para ellos y seguridad para sus propias familias. Tengamos presente que los centros de salud albergan enfermedades intrahospitalarias, además del temido COVID-19.

Otra recomendación. Todas aquellas actividades económicas como la minería, la pesca, el petróleo, entre otras, deben continuar o incorporar a la reactivación aquellas que aún no han sido autorizadas. El trabajador que ingresa sano al trabajo debe salir sano y proyectar los protocolos hacia los demás miembros de su familia.

Prestar oídos a los engañosos cantos de sirena del dogmatismo de izquierda le costará mucho al Perú. Y más a los millones de ciudadanos que ven cómo el logro de muchos años se esfuma tras casi 60 días de fracasada cuarentena.

Guillermo Vidalón
05 de mayo del 2020

NOTICIAS RELACIONADAS >

Inversión versus pobreza

Columnas

Inversión versus pobreza

El cierre de las denominadas brechas sociales depende de la positiva e...

16 de mayo
Cobre: oportunidad perdida

Columnas

Cobre: oportunidad perdida

Durante la semana, según información de un medio local, ...

29 de marzo
¿Cómo lograr la aceptación social?

Columnas

¿Cómo lograr la aceptación social?

Durante los últimos siete días se llevaron a cabo divers...

26 de enero

COMENTARIOS