Cesar Gutierrez
Contradicciones en las leyes peruanas sobre cambio climático
Entusiasmo por la arenga de Greta Thunberg se esfuma con la normativa
Los predicadores peruanos de políticas para mitigar el cambio climático (CC), se han entusiasmado con la arenga de la teenager sueca Greta Thunberg, en la sede de la ONU en Nueva York, durante la Cumbre 2019 de Acción Climática, que se realizó el pasado 23 de los corrientes. La oradora instó, de manera altisonante, a los líderes mundiales a tomar acción inmediata para reducir la emisión de gases de efecto invernadero (GEI). Sin embargo, nuestros “verdes” no han revisado las políticas de Estado existentes en nuestro país, plagadas de contradicciones que van en contracorriente a la prédica.
La normativa peruana al respecto es escasa. Empieza en el 2003, con la Ley de Promoción de Biocombustibles (Ley N° 28054), reglamentada a regañadientes en el 2005, ante la incomodidad de los refinadores de petróleo, entre los que estaba la estatal Petroperú. Se planteaba, entre otros puntos, el desarrollo de cultivos agrícolas y plantas de producción de etanol y biodiesel no solo para reducir la contaminación ambiental, sino también para reducir los GEI. El resultado final es que se ha preferido importar ambos combustibles, bajo el liderazgo de la petrolera estatal. Es decir, el Estado atentando contra las leyes del Estado, ante la indolencia de los activistas.
Posteriormente, en el 2008, se promulgó la Ley de Promoción de la Inversión para la Generación de Electricidad con el Uso de Energías Renovables (DL N° 1002), conocida como Ley de las RER, que promociona la producción de electricidad por centrales eólicas, solares, de biomasa de residuos urbanos y de residuos agrícolas. Se estableció en esta norma que cada cinco años el Ministerio de Energía y Minas (Minem), se pronunciaría sobre la variación del porcentaje de participación de estas energías en el consumo nacional, sobre el 5% inicial que se había fijado. Dos gobiernos se han hecho de la vista gorda ante esta ley, en mayo del 2013 y del 2018, Mientras tanto, el mandatario Martín Vizcarra se ufana de la promulgación en abril del 2018 de la Ley Marco de Cambio Climático (Ley N° 30754), norma llena de generalidades y que hasta la fecha se ha quedado en el nivel declarativo.
En el año 2014 se publicó, por parte del Minem, el Plan Energético Nacional 2014-2025, en el que se establecía como metas para el 2025 el incremento, en términos energéticos de usuario final, del consumo de gas natural (GN) en 169%, y la disminución de las gasolinas en 50% y del diésel en 32%. Los resultados al 2019 son que el consumo de GN no se ha incrementado significativamente, mientras que las gasolinas y el diésel han incrementado su consumo. En este planteamiento hay una gran contradicción: siendo el GN un energético que produce CO2, que es un GEI, ¿cómo se lucha contra el CC fomentando el incremento de su consumo?
Si se tiene deseos de trabajar contra la emisión de GEI se tendría que hacer un monitoreo permanente de éstos y tomar medidas correctivas. El reporte vigente, denominado Inventario Nacional de GEI, es del año 2012. ¿Así se preocupan del CC?
Queda claro que el Estado no tiene rumbo en políticas sobre CC. Las únicas voces que se escuchan reclamando por mayor participación en la atención en la demanda eléctrica es la de los generadores RER. Sin embargo, es necesario precisar que en la emisión de GEI el sector solo representa el 5% del total; no hay que desestimarlos, pero hay que atacar el principal frente, que es la deforestación, responsable del 51% de las emisiones. Mucho desgarro de vestiduras y nada de análisis o de acción.
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