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El empate de Vizcarra con sabor a derrota

Un balance del desenlace de la cuestión de confianza

El empate de Vizcarra con sabor a derrota
Víctor Andrés Ponce
05 de junio del 2019

 

Más allá de haber obtenido la cuestión de confianza con una votación mayoritaria en el Congreso, la iniciativa planteada por el Gabinete del Solar revela que la experiencia republicana, que iniciamos con el nuevo siglo, se tambalea al borde de un precipicio por exclusiva responsabilidad del presidente Vizcarra. El resto es juego de palabras o campañas de medios tradicionales que, a estas alturas, ya son difíciles de entender. En el Perú todo está parado, desde las inversiones mineras hasta el quiosco de la esquina, mientras Vizcarra juega a la guerrita.

La guerra vizcarrista se toma una pausa a la espera de otro momento en que la popularidad del Presidente vuelva a desplomarse, tal como sucedía antes de la cuestión de confianza. En términos gruesos, la aventura deja el siguiente balance: un empate entre el Ejecutivo y Legislativo, porque si bien Vizcarra y Del Solar obtienen la confianza, tienen varios goles en contra. Por ejemplo, el extraño personaje que es Daniel Salaverry ha perdido capacidad de control del Legislativo, y ya no podrá recomponer las comisiones hasta que se elija la nueva junta directiva del Congreso. Fuerza Popular y el Apra recuperan iniciativa, y la edad de la inocencia keikista parece dar paso una nueva época, con una bancada más ducha.

Pero quizá el empate con sabor a derrota para el Ejecutivo se produzca de cara a la opinión pública. Por ejemplo, hoy la ciudadanía sabe que todas las guerras que hace el Ejecutivo se producen para evitar la caída en las encuestas y ocultar el abandono de la cosa pública: crecimiento, reconstrucción, combate a la ola criminal y a la anemia.

Asimismo, las voces que se levantan para cuestionar las estrategias plebiscitarias del vizcarrismo siguen aumentando. Luego del “Pronunciamiento a nuestros compatriotas”, un comunicado de intelectuales, políticos, empresarios y periodistas no partidarizados contra el autoritarismo de Vizcarra; después del pronunciamiento de Ernesto Blume (presidente del TC), el abogado Enrique Ghersi lideró la opinión jurídica contra la idea de que la cuestión de confianza puede imponer plazos y “esencias” a los congresistas; para ello invoca el artículo 206 de la Constitución, que niega expresamente poder constituyente al jefe de Estado. Las posiciones de Ghersi y del periodista Federico Salazar demuestran que la mayoría del vargallosismo toma distancia de la aventura plebiscitaria del vizcarrismo.

Igualmente, la calle no ardió en contra del Congreso, tal como pronosticaban los colectivismos comunistas, no obstante las campañas promocionales de los medios de comunicación. La idea de masas que asaltan el Legislativo (¿acaso no era parte del sueño fascista?) quizá se transforme en masivas marchas de protesta frente un Ejecutivo que ha paralizado el país. Todo indica, pues, que la calle ahora vendrá por la derecha.

A estas alturas el tiempo juega en contra de la aventura vizcarrista. La próxima vez que el Ejecutivo vuelva con el gambito de cerrar el Congreso, la tragedia se habrá repetido tres veces (referéndum y cuestión de confianza) y, a lo mejor, ya no contemplaremos una comedia y a un actor desocupado que hace las veces de político, sino una verdadera tragedia, frente al abandono de la cosa pública. Es casi seguro que las encuestas de Ipsos y las campañas de los medios tradicionales seguirán acompañando a la aventura plebiscitaria de Vizcarra, por la dependencia del presupuesto público, pero nadie puede levantar a un cuerpo que agoniza.

La República sigue salvándose, es verdad. Vizcarra no es dictador, es verdad. Pero no es dictador porque no lo quiera, sino porque no puede tomar el control de todas las instituciones por una resistencia que crece. Lo que sí ha quedado demostrado es que en Palacio hay un autócrata y en la PCM un mediano actor frivolón. A ambos el Perú les interesa un comino porque han organizado el peor gobierno del siglo y han logrado paralizar a todo el país.

 

Víctor Andrés Ponce
05 de junio del 2019

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