En Chumbivilcas rechazan paro antiminero

Luego de haberse instalado la mesa de diálogo en el distrito de Velille, provincia de Chumbivilcas (Cusco), y de una amenaza de paro por una supuesta “contaminación ambiental” y desencuentros entre los pobladores y la compañía Hudbay, los autoproclamados dirigentes del distrito cusqueño decidieron levantar la medida de fuerza por no contar con el respaldo de las ciudadanos.

Según El diario del Cusco, los pobladores han manifestado que “ya están rondando la localidad los que pretenden ser candidatos y se apropian de las demandas justas de la población”. En efecto, en estos días diversos activistas vinculados a la izquierda están por todos los distritos alejados del país con una agenda común: imponer candidaturas para las próximas elecciones locales y regionales, y crear manifestaciones violentas en contra de la democracia y del modelo económico.

En esta oportunidad, ni los dirigentes ni los pobladores de Velille se dejaron amedrentar por la violencia verbal que acostumbran desarrollar los activistas antimineros contra los sectores que no participan de sus “jornadas de lucha”. En Velille los mismos comuneros han desenmascarado a los activistas radicales y han rechazado un intento de paralizar las actividades de la localidad. Tal paralización hubiera representado la coartada perfecta para crear caos y violencia, con objeto de consolidar algunas candidaturas en las elecciones del próximo octubre. La protesta rechazada por la población hubiera servido para victimizar a los revoltosos y para anunciar a los cuatro vientos una supuesta represión en contra de las demandas populares.

Los pobladores de Velille han sido claros: “Los activistas acostumbran utilizar las demandas de la población como plataforma política. Si quieren estar junto a nosotros y que nuestras demandas sean atendidas, que se comprometan a no ser candidatos”.

El extremismo antiminero se ha propuesto ocupar los puestos de regidores, alcaldes, consejeros y gobernadores regionales para contar con herramientas institucionales que les permitan detener las inversiones en minería. Desde allí se han planteado desarrollar una estrategia nacional hacia el 2021, apoyando una candidatura antisistema con los recursos de los gobiernos subnacionales.

La izquierda es campeona creando conflictos donde no hay. Sus relatos crean desconciertos en la población menos avisada. Niega todo lo avanzado en cuanto a cuidados ambientales, económicos y sociales. Por ejemplo, Velille y los distritos de Livitaca y Chamaca han recibido, de Hudbay, maquinaria y equipos agrícolas para expandir mucho más las actividades agrarias de los pobladores. Asimismo, Hudbay ha firmado múltiples acuerdo de cooperación por montos que superan los S/ 10.5 millones para ejecutar programas agropecuarios y hacer del sur un corredor alpaquero y ganadero. El apoyo de la minera es total en el desarrollo de sistemas de riego tecnificado y de programas educativos, de salud y medioambientales, entre otros.

El aporte de la minería en los poblados alejados del país es vital. Según el Instituto de Estudios Energéticos (IDEM, junio 2017), por cada S/ 1,000 millones de exportaciones mineras se generan 21,209 puestos de trabajo directo, indirecto e inducido. Asimismo, de acuerdo al Ministerio de Economía, en el 2007 Chumbivilcas recibió unos S/ 20 millones y en el 2016 unos S/ 180 millones; es decir, nueve veces más en nueve años. Claramente son los presupuestos el objetivo de las candidaturas populistas, personalistas y antidemocráticas en distritos andinos como Velille.

El fracaso del anunciado paro el Velille es un avance importante para la tranquilidad social en el sur. Así también fracasó el paro convocado por Frente Único de Defensa de los Intereses de la provincia de Chumbivilcas (FUDICH) del pasado 11 y 12 de diciembre. Los relatos falsos del movimiento antiminero ya no son fácilmente creíbles.