El Perú tiene que seguir

¿Qué hacer para evitar una crisis de gobernabilidad y seguir avanzando? De una u otra manera los peruanos de buena voluntad entendemos que el Perú se está acercando a una crisis de gobernabilidad que podría poner a prueba a la democracia misma. Generalmente se habla de crisis de gobernabilidad cuando las instituciones creadas por la Carta Política se muestran incapaces de tramitar el conflicto que se genera en el espacio público. Sucede, sobre todo, cuando se desatan enfrentamientos de poderes entre los que no existen puentes ni otros mecanismos mínimos de diálogo entre oficialismo y oposición. ¿Cómo hacemos para recuperar cierta normalidad democrática y abandonar esa sensación de que, en cualquier momento, una denuncia o un documento lo puede arruinar todo? Considerando que el principal responsable de esta situación es el oficialismo, con su inexplicable voluntad de polarizar que no le ha rendido rédito alguno, quizá la clave esté en la conducta que asuman los líderes de la oposición que, si bien ya están en plena calistenia electoral, no deben olvidar que la mejor campaña electoral hacia el 2016 es, precisamente, aquella que garantiza los cronogramas y responsabilidades institucionales. Asimismo se debería entender que la mejor campaña electoral también es la que se desarrolla con una sociedad y un estado en pleno movimiento. No se puede delinear una estrategia presidencial y olvidar, por ejemplo, que si se profundiza la desaceleración económica no solo se afecta al gobierno de turno sino que se clava un terrible cuchillo en las posibilidades de la siguiente administración. Y, sobre todo, se condena al 23% de peruanos en pobreza a permanecer en ese estado, lo cual es una de las peores violaciones a los derechos humanos. En este Portal hemos sostenido que la única posibilidad de seguir reduciendo pobreza es con crecimiento y solo habrá crecimiento si se vuelve a expandir la inversión privada que explica más del 80% de la disminución de la pobreza total de las últimas décadas. ¿Cómo el empresario va a volver a invertir si los líderes de la oposición son incapaces de crear un espacio, una tregua, para que continúen ciertas reformas imprescindibles? Claro que existe el enfoque pesimista que nos dice que todo está arruinado y que las cosas solo cambiarán con el cambio de gobierno. Pero esa manera de razonar es una forma de renunciar al país hasta el relevo del poder. De allí que la idea de un diálogo en medio de tantas batallas no sea una frase vacía que se lanza al viento. En realidad, es la única manera de seguir persistiendo en el Perú, es la única forma de apostar a que el Estado y las instituciones continúen funcionando hasta el cambio de gobierno. Pero, además, es la única manera de que la democracia prosiga pese a sus problemas, porque si el país se detiene no solo se para el Estado sino que se amenaza la libertad. En otras palabras, la pregunta es ¿cómo hacemos para que la campaña electoral no agrave el entrampamiento del espacio público? Necesitamos que continúe la reforma de la educación que ha reiniciado el ministro Jaime Saavedra, que se aprueben los paquetes planteados por el MEF que apuntan a destrabar inversiones e incrementar la competitividad de la economía, e igualmente necesitamos que se implementen los megaproyectos que se han concesionado y nos urge avanzar en la agenda que nos permitirá ser miembros plenos de la OCDE. Es decir, el Perú tiene que seguir. 06 - Feb - 2015