Kenji Fujimori contraataca

En un mensaje por Twitter, el abogado César Nakasaki sostiene que “si una persona simula una negociación para vender voto, siendo su finalidad probar compra venta de votos, no comete delito; es lo que en derecho penal se llama un agente provocador, y no se le sanciona”. El mensaje fortalece la posición de héroe nacional del congresista Moisés Mamani, de Fuerza Popular (FP). Mamani, representante de Puno, es el autor material de las grabaciones realizadas de manera subrepticia y que muestran a Kenji Fujimori y otros implicados actuando de manera repudiable. Los llamados kenjivideos (que deberían ser keikovideos) documentan la manera vergonzosa como se compraban los votos para evitar la vacancia del ahora ex presidente Pedro Pablo Kuczynski.

El asunto no queda allí. Otro tuit de La Razón de Chiclayo, difundido por Alejandro Aguinaga, médico del ex presidente Alberto Fujimori, da cuenta de que Kenji Fujimori estaría viendo la posibilidad de presentarse como testigo protegido en el caso Odebrecht. Asimismo, la congresista Maritza García, del grupo de los “avengers”, de Kenji, anunció “una guerra fatal. Kenji va a dar testimonio de los hechos que él conoce en el caso Odebrecht”. Finalmente, Kenji Fujimori admite que será testigo en los casos que sean necesarios para demostrar quienes son los corruptos.

¿Era necesario que el congresista Mamani, representante de Puno, grabe las conversaciones con sus interlocutores para demostrar las compras de votos para evitar la vacancia de Pedro Pablo Kuczynski? ¿Cree usted que Moisés Mamani actuó por iniciativa propia?

El pasado 11 de marzo, Lucio Ávila, también congresista de FP por Puno, admitió —por intermedio de una carta— que abandonó el partido de Keiko Fujimori porque “el Gobierno de Pedro Pablo Kuczynski le ofreció construir diez plantas de tratamiento para el cuidado del Lago Titicaca”, proyectos que según el congresista no tuvieron el respaldo de su agrupación parlamentaria.

¿Por qué, entonces, FP no usó la carta de Ávila para descubrir la compra de votos por obras que ofrecía PPK? La carta demostraría los ofrecimientos de prebendas y cuotas de poder: el congresista Ávila se cambió de bando para evitar la vacancia de PPK —según él— por obras para su pueblo. Es así que, el operativo —o la emboscada— de Mamani parece que tenía un objetivo: Kenji Fujimori. Y el líder de las caricaturas cayó sin mayor esfuerzo, por la confianza en las aguas mansas.

En referencia al caso, Jaime Antezana, especialista en temas de narcotráfico en el Perú, llama narcovideos a los kenjivideos o keikovideos. Según Antezana, estos han sido realizados por uno “de los 14 capos que tiene FP”. En clara alusión al congresista Mamani señala que “fue quien financió la campaña en 2016. Es quien hace vuelos de droga (cocaína) a Bolivia. Es quien tendría una fábrica de fideos en Bolivia. Es quien tiene muchas empresas, pero que parece no tenerlas”. Temerarias acusaciones que Antezana sostiene desde antes de la campaña electoral del 2016.

El pleito entre el anterior Ejecutivo y la mayoría del Legislativo, y ahora entre los hermanos Fujimori dedicados a la política, no es por asuntos relacionados con la corrupción, como se querido hacer ver. Es una intestina lucha crónica y agudizada por el poder político.

Se dijo antes de las elecciones del 2016 que la representación congresal sería de las mejores. Moisés Mamani debía ser uno de esos mejores. Pero no, por lo visto en la conferencia en la que hizo público los narcovideos, kenjivideos o keikovideos, parece que fuera una persona enajenada, secuestrada por FP sin poder responder por sí solo a las preguntas de la prensa. La plata y la sujeción a la “jefa” habrían determinado su inclusión en la lista de candidatos al Congreso por FP.