Venezuela se retira de la OEA

Jugada del autoritarismo para que evitar que se active la Carta Democrática

Delcy Rodríguez, canciller venezolana, ha anunciado, a nombre de su país y su gobierno, que iniciarán el proceso para retirarse de la Organización de los Estados Americanos (OEA). Una gran sorpresa, porque desde la creación de este organismo internacional, en 1948, ningún país se había retirado. Pero este sería el epílogo de una relación que en los últimos meses se tornó infructuosa, llena de insultos y amenazas entre el gobierno autoritario de Nicolás Maduro y el secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro. ¿Qué ha originado esta arrebatada actitud de Maduro y su gobierno? Una reciente reunión de los 34 cancilleres (ministro de relaciones exteriores), aprobada en los últimos días, fue el detonante para que Venezuela cumpla con la amenaza lanzada semanas antes.

¿Por qué Venezuela ha decidido retirarse del organismo internacional? La explicación es sencilla: la reunión de cancilleres —solicitada por varios gobiernos, entre ellos Perú, Chile, Brasil, Costa Rica y Colombia— era un paso importante para activar finalmente la Carta Democrática Interamericana contra el gobierno autoritario de Maduro. Cabe recordar que este es un mecanismo de sanción política, moral y diplomática contra un gobierno cuando atenta contra la libertad y los Derechos Humanos de sus ciudadanos, o cuando utiliza de manera descarada las instituciones que garantizan el Estado de Derecho.

En las últimas semanas se ha visto de forma clara cómo el gobierno de Maduro ha utilizado la mano de hierro contra la oposición democrática reunida alrededor de la Mesa de Unidad Democrática (MUD). Primero, el manotazo legal que le quitaba las funciones a la Asamblea Nacional, lo que representaba un golpe de Estado; y segundo, la reacción brutal y bárbara contra las protestas organizadas por la oposición democrática, con más de 26 muertos y alrededor de 450 heridos.

Con la retirada de la OEA, el gobierno chavista evita las posibles sanciones y ya no tendría las limitaciones para seguir aplicando la brutal represión con la oposición que se moviliza en las calles. No obstante, el proceso de retirada de la OEA no es sencillo. Luego de demandar a la OEA, el gobierno venezolano deberá pagar los más de US$ 8 millones que adeuda al organismo internacional.

¿Cuál es la estrategia de Maduro? El régimen chavista apuesta a activar con mayor atención otro espacio diplomático: la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). Esta es una instancia que desde su creación fue auspiciada y fortalecida por el gobierno chavista. Frente a las presiones de la OEA, el chavismo huye hacia la CELAC.

Todo ello sucede en medio de una crisis económica, social y política de gran magnitud. No solo la economía venezolana se ha hundido como jamás en su historia republicana (en el 2016 la inflación superó el 500%, la economía cayó en -7% y la pobreza castiga al 50% de la población), además todo diálogo entre la oposición democrática y el gobierno chavista está roto.

Diversos analistas sostienen que el gobierno de Maduro está jugando los descuentos, y que sin el apoyo de la cúpula militar el autoritarismo ya habría caído. Venezuela se queda cada día más sola en el concierto internacional; incluso podría ser separada definitivamente del Mercosur, un acuerdo de comercio regional. A ello ha conducido el socialismo del siglo XXI.