OEA: mano blanda al autoritarismo venezolano

Argentina encabezó oposición a la Carta Democrática contra Maduro

Días atrás el Consejo Permanente de la Organización de las Naciones Unidas resolvió, a través de un informe, que el gobierno y la oposición venezolana encuentren “un camino de conciliación” para hacerle frente a los graves problemas sociales y políticos que existen en ese país. ¿Qué significa eso? En lenguaje diplomático, la posición adoptada por los miembros del consejo permanente es un espaldarazo al gobierno autoritario de Nicolás Maduro y diluye la posibilidad de abrir la Carta Democrática contra el régimen chavista.

A todas luces la posición adoptada por el Consejo Permanente es una victoria diplomática del gobierno de Maduro, que ahora tiene licencia para seguir, tal como lo han denunciado los líderes opositores, con su política de persecución y violación de los Derechos Humanos. Tras un largo debate de diez horas en el que, por ejemplo, no se le dio uso de la palabra a Luis Almagro, secretario general de la OEA, el Consejo Permanente, bajo la tutela del representante de Argentina, aprobó un borrador en el que se pide dar mayor tiempo a la comisión presidida por el ex mandatario español José Luis Rodríguez Zapatero para mediar entre la oposición democrática y el gobierno autoritario chavista. El nuevo mandato de la OEA, según el borrador del informe, es la “reapertura del diálogo” entre la oposición democrática y el chavismo.

El embajador argentino ante el Consejo Permanente de la OEA, Juan José Arcuri, fue quien encabezó la oposición a la propuesta para activar la Carta Democrática contra Maduro y su gobierno autoritario, que días antes planteó el secretario general Luis Almagro. ¿Cuál es la explicación de este nuevo punto de vista de Argentina, país hoy en manos de un régimen democrático como es el de Mauricio Macri? Todo indica que el cálculo y la geopolítica han marcado el aval argentino hacia el régimen de Maduro. En los próximos días se definirá si Argentina, a través de su canciller y representante, Susana Malcorra, es nominada para la Secretaría General de las Naciones Unidas. En ese sentido, Argentina necesita el respaldo del voto venezolano con asiento permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU. Aquello habría sido el motivo para que el Consejo Permanente, con Argentina a la cabeza, rechace la propuesta de su secretario general.

El incidente ha causado desconcierto en la oposición democrática venezolana y alegría en el seno del chavismo y sus aliados (como Cuba), que ya celebran e informan de una victoria diplomática. Si el Consejo Permanente de la OEA aprobaba la propuesta de Luis Almagro, los 35 estados miembros iban a debatir la activación de la Carta Democrática contra Maduro en República Dominicana entre los días 10 y 20 de junio.

Esta curiosa alianza entre la Venezuela bajo el autoritarismo de Maduro y Argentina, país que ha retornado hace poco a la senda de la democracia con Macri, no es sino ejemplo de la poca importancia que tienen el estado de derecho, la defensa de las libertades y los derechos humanos cuando de real politik se trata.