Salud mental: el rol transformador de los medios de comunicación

A través de su poder de influencia y alcance masivo los medios de comunicación tienen la capacidad de formar nuestra comprensión acerca de temas diversos, entre ellos la salud mental. Un problema constante es que, a pesar de que los temas relacionados a la salud mental afectan a las personas de manera global, el enfoque y tratamiento que se le da en los medios cae en estigmas y suposiciones, afectando a quienes padecen de estas enfermedades. Sin embargo, en los últimos años se está presentando un cambio positivo en la narrativa acerca de la salud mental, y los medios de comunicación están siendo utilizados como una herramienta de sensibilización y educación al alcance de todos.

En un artículo de la Asociación Amanecer, que ayuda a personas con problemas de salud mental y sus familiares, se menciona el gran poder que los medios de comunicación ejercen para influir en la percepción de la realidad de la sociedad. A pesar de que con el tiempo ha habido una mejora en la forma de transmitir los temas relacionados con la salud mental, aún se cae en ciertos estereotipos o imágenes erróneas que pueden llegar a afectar a los involucrados.

Como complemento, los medios de comunicación también tienen un impacto crucial en la educación. En un artículo de la revista académica The Conversation, Jesús Díaz – Campo y Sergio Arce señalan que el impacto de las redes sociales y los influencers es cada vez mayor. En el 2020, más de un 65% de personas entre los 16 y los 74 años usaron la red para buscar información relacionada a la salud mental. Esto mostró un incremento de 7% respecto al año anterior, con lo que podemos llegar a mencionar que este método de búsqueda de información va creciendo con los años.

La educación mediática puede empoderar a las personas para que busquen ayuda cuando la necesitan, y para que reconozcan los signos de problemas de salud mental en sí mismos y en los demás. En el aspecto de la salud mental es especialmente importante, debido a la información errónea que muchas veces puede ser brindada por caer en mitos acerca de ciertas enfermedades. Si se presenta información basada en evidencia, como lo hacen muchas páginas y revistas académicas, los medios pueden servir para brindar una comprensión más precisa y empírica sobre trastornos mentales.

Respecto a la forma de brindar la información, los medios de comunicación deben tener en cuenta que el papel que cumplen puede involucrar de manera positiva o negativa a mucha gente en base a su forma de actuar. La cobertura irresponsable de temas de salud mental puede reforzar el estigma, aumentar el miedo y la desinformación, y, en última instancia, hacer más daño que bien. Se busca que los medios desarrollen un enfoque responsable y ético sobre la información que se brinda para no caer en los problemas anteriores.

Según un artículo de Infocop, Consejería General de Psicología de España, los medios deben centrarse en promover un entendimiento humanizado y que no perpetúe los estereotipos negativos. Si el medio de comunicación quiere realmente formar parte de la solución al problema, tiene que actuar con la debida responsabilidad, ayudando a eliminar el estigma que rodea a la salud mental. Esto ayuda a que exista mayor comprensión por parte de la sociedad con ciertos aspectos a los que no se le daba la importancia necesaria.

Los medios de comunicación tienen un papel fundamental en la configuración de nuestras actitudes hacia la salud mental. A través de la sensibilización, la educación y un enfoque ético, pueden contribuir significativamente al fomento de una sociedad más informada y compasiva. Sin embargo, este poder viene con una gran responsabilidad. Es imperativo que los medios continúen evolucionando en su tratamiento de la salud mental, asegurándose de que su influencia sea una fuerza positiva en la lucha contra el estigma y en la promoción del bienestar mental. Con un enfoque cuidadoso y comprometido, los medios pueden ser verdaderos agentes de cambio en la forma en que nuestra sociedad percibe y aborda la salud mental.