Rafael López Aliaga cada vez con mayor respaldo popular

La última encuesta de Datum Internacional –compañía de investigación de mercado– señala que el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, emerge como la autoridad con mayor respaldo popular (29%), no obstante el silencio informativo a que es sometida la gestión edil. Sucede que el actual alcalde cuestionó duramente a la brasileña Odebrecht durante la campaña presidencial del 2021 y algunos propietarios de medios de comunicación están comprendidos en los actos de corrupción junto a la constructora.

Según el estudio de opinión pública, el 67% de los encuestados desaprueba la gestión. Al parecer, la razón principal sería el desconocimiento de las obras que ejecuta la municipalidad. Empero, si los medios de comunicación informaran sobre la labor del alcalde, lo más probable es que su nivel de aprobación sería inclusive más alto.

Por otro lado, el informe segmenta la ciudad de Lima en cinco conos con los respectivos niveles de aprobación en porcentajes: Centro 23%, Moderna 25%, Norte 27%, Este y Sur con 34%. La diferencia respondería a que el alcalde ha orientado la labor de la comuna hacia los sectores de menores ingresos, los más vulnerables. Eso explica que el mayor respaldo ciudadano proceda del nivel socio económico E, que le otorga 36%, seguido del D con 32%. Los conos Sur y Este son las zonas de residencia principales de los más pobres, que a su vez albergan al mayor conglomerado social.

El estudio también incluye el desagregado por edades, el respaldo que logra López Aliaga en el grupo etario que va de 18 a 34 años supera el 30% y, en quienes se encuentran entre los 45 y 54 años le brindan un respaldo de 39%. Esto último responde a que los vecinos de Lima que integran este grupo etario han participado en la elección de al menos cuatro alcaldes metropolitanos, quienes al final de sus mandatos no satisficieron la expectativa ciudadana. Además, existe el precedente de Susana Villarán, quien será sentenciada por actos de corrupción.

El alcalde rema cuesta arriba, superando progresivamente el descrédito de toda la clase política. Todavía le queda poco más de dos años de gestión municipal y quien visite el centro de Lima verá que la ciudad está registrando un cambio significativo. Algunos se preguntan por qué en el centro se destinan recursos para la recuperación de los frontis de muchas iglesias. Sucede que éstas forman parte de la herencia cultural de la ciudad; por lo tanto, son monumentos que deben enorgullecer a los vecinos y, además, impulsan una actividad económica como el turismo. Lima fue el centro del Virreinato de la corona española en Sudamérica durante los 300 años previos a la independencia, por lo que la restauración de las fachadas de los templos tiene una trascendencia mayor a la coincidencia de que el alcalde comparta la fe que en esas edificaciones se profesa.

Ningún otro miembro de la clase política nacional, de la dimensión de Rafael López Aliaga, ha logrado tan amplio respaldo. Un análisis más equilibrado debería contemplar el nivel de aprobación de las autoridades ediles que lo antecedieron a 33 meses de su gestión.