Fraude caviarsocialista

Un nuevo hecho indignante ocurre en el Perú, y es hora de que todos nos demos cuenta de lo que está sucediendo. Hace unos días salió a la luz que diversos partidos políticos, todos de ideología de izquierda o vinculados a la caviarada peruana, han incurrido en la falsificación de firmas para lograr su inscripción en el Jurado Nacional de Elecciones.

Evidentemente es, un hecho que tiene que hacernos reflexionar a todos sobre quiénes queremos o decidimos que lleguen al poder. No podemos seguir permitiendo que se burlen de nosotros, desde el simple hecho de que utilicen, de manera fraudulenta, nuestras firmas para inscribir un partido.

Al margen de esta situación, principalmente debemos ver cuáles son estas agrupaciones que osan utilizar la firma falsa del ciudadano de a pie. En el informe del Reniec, se detalla que partidos como el de Martín Vizcarra, responsable de gran parte de las muertes de la pandemia, así como también de vacunarse fraudulentamente: Perú Primero presentó 5,117 firmas que son consideradas falsas, hechas por un mismo puño.

Esto tiene que levantar las alarmas de quienes se consideran simpatizantes de Vizcarra pues, pese a estar inhabilitado, hace campaña política y busca llegar al poder mediante el voto popular. Sin embargo, la mentira no se escapa de su entorno, porque así como nos mintió a todos los peruanos sobre su inoculación, ahora pretende mentirnos en las afiliaciones de su partido. Con este tipo de sucesos, simplemente “no hay peor ciego que el que no quiere ver”.

Pero eso no es todo, pues otro de los partidos que también está involucrado en la inscripción irregular por firmas fraudulentas es el de Guillermo Bermejo Rojas, quien es un personaje ligado al terrorismo y que busca candidatear a la presidencia. El partido de Bermejo, amigo del prófugo Vladimir Cerrón Rojas y del golpista Pedro Castillo, ha logrado la inscripción de su grupo político con el uso de más de 4,000 firmas que se hicieron a un solo puño.

No es necesario ser vidente o conocedor del espectro político para entender que estos partidos de la izquierda y de la caviarada usan artimañas para escalar al poder y llegar, no solo a ocupar la presidencia de la República, sino también el Parlamento. Es decir, usan, como ya es frecuente, la mentira, de la mano con la victimización para que los electores los elijamos. Y peor aún, pretenden gobernar un país que cada vez se está yendo en declive, y esto es por la mala administración de gobiernos que son de ideologías similares a las que ellos profesan.

El momento ya está aquí. Debemos abrir bien los ojos y, en lugar de quejarnos de un país que cada vez se hunde más, busquemos las verdaderas opciones saludables para salvarlo de la podredumbre política en la que estamos envueltos hace décadas. Ya dejemos de votar por el mal menor que termina siendo peor, y votemos por la mejor opción para el país que todos queremos.