¿De primos hermanos a enemigos de clase?

La pugna entre Patria Roja y Sendero Luminoso

La huelga magisterial, justa en su reivindicación salarial y revaloración gremial, era inicialmente provinciana, pero ahora se ha generalizado. Viene sacudida por una potente movilización y en grave perjuicio para la educación de los niños. Además ha puesto en evidencia una pugna entre las cúpulas por el control político-sindical del magisterio: Patria Roja, Conare-Movadef (Sendero Luminoso) y otras facciones que pululan al interior del magisterio.

Patria Roja y Sendero Luminoso nacieron de un mismo vientre, el Partido Comunista Peruano (1928). A fines de los sesenta una facción capitaneada por Saturnino Paredes (prochina) rompe con el PCP de Jorge del Prado (pro-moscovita), llevando en su vientre a los mellizos Patria y Sendero. A inicios de los setenta Patria y Sendero rompen con Paredes, cada uno por su lado, y terminan siendo una especie de primos hermanos en pugna.

A fines de los setenta Sendero considera que las condiciones para “la revolución” están maduras y lanza el ILA (inicio de la lucha armada, 1980) desatando su violencia criminal. Mientras tanto, Patria juega a dos aguas: primero "boicotea" (1978-1979) las Elecciones Constituyentes y fracasa, luego participa (sin autocrítica) en las elecciones de 1980 (mediante el UNIR-Izquierda Unida) y en otros procesos. En su accionar terrorista Sendero considera a Patria Roja un escollo entre las masas para su acción violentista, y por ello mata alcaldes y líderes de ese partido, para allanar su “camino al poder”. Esta pugna se refleja dentro del SUTEP.

¿Cuánto ha cambiado Sendero después de su derrota militar? Ante su fracaso de 1990, Sendero inicia el activismo de masas para volver a “acumular fuerzas”. Sendero no ha cambiado de ideología, cree en la guerra, la reivindica, solo ha cambiado de táctica, por eso plantea la "amnistía política para resolver los problemas derivados de la guerra". Con esa táctica quiere participar en elecciones mediante Movadef-FUDEPP. Y en lo sindical, creando sindicatos paralelos como la FENDEP, infiltra gremios, partidos y movimientos regionales con “cuadros legales" todo terreno, para tener regidores y consejeros en diversos gobiernos subnacionales. Es su juego montarse en huelgas y movilizaciones para “ganar espacios” agudizando contradicciones y, así, reposicionarse “preparando las condiciones objetivas y subjetivas" para la guerra. Están convencidos de conseguir sus propósitos por esa vía, por eso jamás pedirán perdón, creen en la "justeza del pensamiento Gonzalo como guía para la revolución mundial". Aprovechan la candidez de grupos políticos que les dan cupos en listas municipales, regionales y parlamentarias.

Entre tanto Patria Roja languidece, lucha con sus propios demonios y no define si asume insertarse a la democracia plenamente. Sus cuadros sindicales se han burocratizado, los radicales les están quitando sus bases magisteriales.

En esta huelga Movadef-Conare y aliados han declarado a Patria Roja y al CEN- SUTEP como " enemigos de clase”, y con ello pretenden legitimarse sindical y políticamente para negociar en el futuro inmediato, y en mejores condiciones, con el Gobierno. En ese esfuerzo PPK, sin querer queriendo, les está dando una manito al convocarlos ¡a Palacio!, porque irán camuflados entre dirigentes magisteriales. Sendero pesca a río revuelto. Muy difícil, en estas condiciones, dialogar separando el trigo de la paja, como quisiera el gobierno; los senderistas nunca aceptan públicamente que lo son. La falta de expertise en materia de conflictos y manejo político puede acarrear graves consecuencias para la democracia, que hoy aparece más boba que nunca.

Por propios errores del CEN-SUTEP, Sendero los quiere tumbar; y también a Patria Roja, a la que consideran un escollo para sus planes subversivos. Y, claro, están en juego 1,750 milloncitos que maneja la Derrama Magisterial.
 

Edgar Villanueva

Fotografía: Cusco en portada