Aprobación de Vizcarra continúa en caída libre

En el Perú, como en diversos países del mundo, los inversionistas locales y extranjeros no se limitan a las oportunidades de negocio que se les presentan en una economía con fundamentos macroeconómicos estables. Para sus decisiones empresariales también toman en cuenta factores como la estabilidad jurídica de un país, los conflictos sociales, la corrupción y la inseguridad ciudadana, entre otros.

La aprobación al presidente de la República, Martín Vizcarra, cayó dos puntos porcentuales en el último mes, y se sitúa en julio en 27%, según la reciente encuesta nacional urbano rural de GFK. Es decir continúa en caída libre. En junio, el jefe de Estado contaba con el respaldo del 29% del país. Si comparamos las cifras de mayo a julio, la caída de la popularidad de Vizcarra es abismal: cayó 20 puntos porcentuales (de 47% a 27%).

El mandatario cuenta con un mayor respaldo en Lima que en las zonas del interior del país. En la capital su aprobación se ubica en 35%, en contraposición al 19% que apenas consigue en la zona sur del país. En el centro (20%) su aprobación también es una de las más bajas. En tanto, la desaprobación a la gestión de Martín Vizcarra también subió ligeramente: pasó de tener 56% en junio a 58% en julio. En el sur del país, el cuestionamiento a su Gobierno llega incluso a 73%.

Estos preocupantes resultados afectan la estabilidad política y no generan un clima de confianza en la población, lo cual es negativo para el país. Y considero que son fruto de la percepción de la población de que la gestión del presidente Martín Vizcarra no está tomando con firmeza las medidas correspondientes para combatir los principales problemas del país, como son la corrupción, la inseguridad ciudadana y las trabas burocráticas. Tampoco percibo señales de cambios estructurales en muchas de las entidades del Estado, a pesar de las nefastas cifras en la gestión del pasado Gobierno.

En el año 2017 se incrementó en 1% el índice de pobreza en el país, un problema que afecta a casi siete millones de peruanos. La presión tributaria (ingresos como porcentaje del producto bruto interno) del Perú apenas alcanzó un nivel de 12.9% del PBI, y la tasa de crecimiento económico apenas alcanzó el 2.5% del PBI, entre otros resultados negativos.

En tal sentido, a pesar de su reciente mensaje a la nación por Fiestas Patrias, en el que presentó algunas propuestas populistas, como la convocatoria a un referéndum para la no reelección de congresistas, mientras no se perciba que el presidente Martín Vizcarra enfrenta con firmeza y transparencia a la corrupción, que enfrenta con estrategias adecuadas a la inseguridad ciudadana y que realiza cambios estructurales en muchas de las entidades del Estado (con ajustes no solo en los procesos, sino también en los recursos humanos a todo nivel, empezando por el directivo), la caída de la aprobación de Martín Vizcarra lamentablemente se mantendrá en los próximos meses. Y ello influirá negativamente en los inversionistas, tanto locales como extranjeros, afectando el clima de negocios en el país.

Nota del autor. Este artículo está dedicado a la memoria de mí querida madre Blanca Noemí Molina Niño de Guzmán. Este 6 de agosto de 2018 se cumplen cinco años de su partida al reino de Dios, y es quien desde el cielo me acompaña y la luz que me guía.