Plagio, teflón y corrupción

Sobre el supuesto plagio del candidato César Acuña

De ser cierto el plagio en la tesis doctoral de César Acuña otorgado por la Universidad Complutense de Madrid, será él mismo -por su falta ética y el embuste cometido- quien se haya hecho el mayor daño. Además (y lamentablemente) las universidades creadas por el candidato apepista sufrirán una severa afectación de su reputación. El malestar involucra a sus autoridades, profesores, directivos, alumnos y padres de familia.

De paso, y es necesario decirlo, la propia Universidad Complutense queda muy mal parada.

Me pregunto por ejemplo, ¿qué pensará o decidirá ahora la doctora Beatriz Merino quien hace poco aceptó incorporarse como directora del grupo de instituciones educativas fundadas por el candidato Acuña?

Hasta ahí el efecto nocivo en términos académicos, empresariales y en la reputación de Acuña.

La pregunta ahora es si ante semejante escenario el candidato sufrirá daños o una notable merma en sus aspiracionespara llegar a Palacio. Mi respuesta es: claro que sí. Si la pregunta sería si la onda expansiva de esta bomba será tal que saque de carrera a Acuña y/o le impida seguir creciendo. Mi respuesta es: no lo sé, en todo caso, lo dudo.

A la fecha, las encuestas han reflejado el crecimiento de Acuña hasta colocarlo en  segundo lugar y en un virtual empate técnico con PPK. Incluso luego que al candidato se le acusó de diversos actos de corrupción, maltratos físicos a su ex esposa y además, una violación posteriormente negada por la supuesta víctima. Todo esto lleva a muchos a estimar que el ex gobernador de La Libertad ha construido un teflón electoral de cierto grosor que lo vuelve inmune a los ataques de las tiendas adversarias.

Con tales antecedentes ¿la denuncia del plagio doctoral tampoco tendrá efecto en el teflón de APP, o incluso, victimizará aún más al candidato haciéndolo crecer en los sectores que no son A/B, determinantes para el resultado del 10 de abril?.

Manteniendo mis dudas me inclino a pensar que la denuncia, en el escenario más negativo para Acuña, le va a restar un significativo respaldo en el A/B por la influencia mediática del escándalo pero no en los sectores populares. Básica y lamentablemente, porque el “pragmatismo” y la poca adhesión a valores esenciales, como la honestidad y el respeto a las personas e instituciones, es un mal que nos atraviesa como sociedad de cabo a rabo. Incluyendo a los estratos “altos” y de mayor “educación”.

Dicho sea de paso, hace un par de días, cuando los candidatos fueron convocados por Pro Etica para dar a conocer sus planes anticorrupción, escuchamos varias propuestas (algunas interesantes, novedosas y dignas de tomar en cuenta). Pero por alguna razón, ninguno de éstos abordó una de las causas fundamentales para que este mal se siga manifestando y reproduciendo en diversos ámbitos de la vida pública y privada del país: la tolerancia y la permisibilidad social para con la corrupción.

Ojalá me equivoque, pero si Acuña sigue creciendo en las siguientes encuestas y llega incluso a pelear su pase a la segunda vuelta, Pro Etica y los asistentes a este foro tendrán muy en claro no solo por qué el candidato de APP no acudió a su llamado sino porqué la corrupción se sigue enraizando en el Perú.

Por: Mario Saldaña