La educación “revolucionaria” que propone Perú Libre

Días atrás, desde aquí publicamos un informe sobre la educación marxista que quiso implantar Vladimir Cerrón, jefe y dueño del partido Perú Libre, que postula a Pedro Castillo a la presidencia. En aquel informe revelamos las estrategias desarrolladas por Cerrón durante su gestión frente al gobierno regional en Junín para convertir a la educación pública en el centro del adoctrinamiento marxista.

Aquí hemos revisado el Ideario programa presentado por el partido del candidato Pedro Castillo, redactado por Cerrón, y nos hemos detenido en el análisis del capítulo educativo, y se trata de la misma estrategia de adoctrinamiento que se pretendió aplicar en Junín.

En el capítulo V, denominado Nueva Escuela Pública, orientado a la educación, además de indicar que el 10% del PBI será destinado al sector (un absurdo desde el punto de vista presupuestal) se propone la implementación de lo que se denominará Nuevo Currículo Nacional, Regional y Local. ¿Qué se plantea? Pues bien, según el documento, se elaborará “un currículum que forme ciudadanos con identidad nacional, autoestima, solidarios, dignos, íntegros, autónomos y revolucionarios”.

Asimismo, se añade lo siguiente: “Con los estamentos docente, estudiantil y popular, debemos formular un Nuevo Currículo Nacional (NCN) rector, que descolonice la cultura, la historia y la ciencia y a partir del cual se diseñen el Nuevo Currículo Regional (NCR) y el Nuevo Currículo Local (NCL)” ¿Les suena conocido?

La propuesta de Cerrón no permite dudas: convertir a la educación en el instrumento de adoctrinamiento “revolucionario”. Como todas las dictaduras de izquierda marxista, como en Cuba o Venezuela, el adoctrinamiento a través de la escuela es una de las estrategias de las viejas tradiciones comunistas.

No solo eso, la propuesta de Cerrón y Castillo es derogar todos los avances que se han realizado para mejorar la calidad de la educación peruana. De allí entonces que se pretenda liquidar la Ley de Reforma Magisterial, que según Cerrón ha sido “redactada con espíritu neoliberal conllevando claramente a la educación peruana por el camino privatista y mercantilista”. Esta ley era la única que garantizaba que los pobres tengan una educación de calidad frente al abuso y la prepotencia del sindicato de profesores.

Para completar la batería de propuestas, Cerrón nos señala que “van a reponer a todos los maestros despedidos de manera irregular por políticas de racionalización neoliberal”. Es decir, lo que quiere Perú Libre es pauperizar la educación pública y de los más pobres.

Y como colofón nos quedamos con esta propuesta que también figura dentro del famoso Ideario: “El socialismo no aboga por la libertad de prensa, sino por la prensa comprometida con la educación y la cohesión de su pueblo”. Sin palabras.

Todo lo que indicamos líneas arriba está descrito en el plan que Perú Libre quiere para los peruanos en caso de ganar Pedro Castillo: un plan para que la educación sea el centro de adoctrinamiento del marxismo. De allí la enorme importancia de votar con responsabilidad este 6 de junio. No solo se trata de preservar las inversiones, el empleo, de seguir luchando contra la pobreza, sino también de salvar la educación de nuestros hijos. Advertidos estamos.