¡Currículo marxista en Junín!

El gobernador regional de Junín, Vladimir Cerrón, anunció un “Nuevo diseño curricular regional” para Junín e instó a los profesores a acatarlo y defenderlo. Además advirtió a los directores que deben renunciar voluntariamente si no están de acuerdo con este nuevo plan educativo, lo que resulta una propuesta arbitraria. Cerrón pretende concretar el sueño marxista de imponer una “ideología oficial” sobre determinadas materias del currículo, no obstante que la Constitución y las leyes lo prohíben expresamente.

Cerrón, el gobernador marxista-leninista, señala que los profesores de la escuela pública enseñarán filosofía, economía política, geopolítica e historia regional, obviamente desde el punto de vista colectivista. Sin embargo, su propósito no es forjar desde el colegio estudiantes críticos, con capacidad de cuestionar y de entender todas las posibilidades del hombre libre en medio del universo. La intención de Cerrón es clarísima: el adoctrinamiento marxista desde las escuelas públicas.

El nuevo currículum educativo no enseñará filosofía para forjar hombres cuestionadores, que traten de comprender todas las posibilidades del hombre libre en medio del universo. La filosofía marxista que enseñarán los profesores pretenderá emancipar a los estudiantes de Dios, promoviendo el ateísmo. Asimismo, intentarán desvincular a los estudiantes de la riqueza conseguida por el ingenio creativo individual y del capital. Según Cerrón, el Perú debería ser una sociedad de pobres y dominados por una visión ideológica de la sociedad.

El objetivo de Cerrón no es la construcción de una sociedad de oportunidades infinitas, donde el debate, los entendimientos y los acuerdos entre las partes diferentes prevalezcan. Para Cerrón las sociedades deben ser cerradas, nacionalistas y apartadas de la dinámica mundial de la prosperidad. El currículum de Cerrón pretende crear una sociedad dominada por personas como Nicolás Maduro, en lugar de fomentar sociedades democráticas, con pensamientos diversos, donde impere la libertad económica, política e individual.

Los profesores marxistas, los que sobrevivan de la depuración oficial advertida por Cerrón, dictarán historia nacional y regional sesgada. Enseñarán, por ejemplo, que Sendero Luminoso (SL) es un movimiento popular organizado alrededor de la injusticia y las demandas sociales y no un movimiento terrorista y sanguinario. Además, alrededor de los relatos históricos transmitirán frustraciones y pesares, odios y resentimientos. En lugar de enseñar la promoción el aprovechamiento de las habilidades individuales, el mercado libre, la competencia y las inversiones, promoverán la construcción de un Estado paternalista, con los ciudadanos reducidos a la voluntad de la autoridad.

La consolidación de la izquierda en Junín es una fantasía, un relato falso de los comunistas. Según la Oficina de Procesos Electorales (ONPE), al 100% del cómputo electoral, Vladimir Cerrón, de Perú Libre, ganó las elecciones regionales con 221,550 votos emitidos. En Junín, los electores hábiles suman 936,888, de los cuales solo participaron 726,696 electores. Es decir, hubo una abstención del 22.44% (22 de cada 100 electores no participaron de las elecciones). Entonces, los votos de Perú Libre solo representan al 23.64% de los electores registrados. En ese contexto, ni la cuarta parte de la población, representada por sus electores, es favorable a Cerrón. ¿Cómo, entonces, es posible que una minoría en el poder pretenda modificar el currículum educativo de los escolares pobres de Junín al margen de la Constitución y la autoridad del Estado nacional?