Otra vez Las Bambas bajo ataque radical

Las Bambas (en Cotabambas, Cusco), uno de los proyectos de cobre más importantes del país, cerrará sus operaciones debido al bloqueo de la carretera que impide el transporte de mineral de la mina hasta el puerto de Matarani, y el abastecimiento de insumos y repuestos necesarios para continuar con las actividades mineras.

Desde el 22 de setiembre pasado, los pobladores del distrito de Ccapacmarca (provincia de Chumbivilcas, Cusco), azuzados por la izquierda antiminera, bloquean las vías de ingreso a la mina y exigen a las autoridades cerrar el tránsito a los camiones mineros, la construcción del mineroducto y la modificación del Estudio de Impacto Ambiental (EIA). 

Las Bambas aporta el 16% de la producción de cobre del país, suma cerca del 1% al Producto Bruto Interno (PBI) y ofrece empleo a más de 8,000 personas, la mayoría de la zona andina. Por las continuos bloqueos de carreteras, las exportaciones mineras, hasta agosto pasado, cayeron 11.6%. Según la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), la paralización de Las Bambas será un duro golpe para la economía nacional.    

Los más de 105 días de paralizaciones durante el presente año ocasionan pérdidas de US$ 75 millones a Mineral y Metals Group (MMG), concesionaria de Las Bambas. Además, el stock de insumos se agota e impide la continuidad de las operaciones. Los trabajadores tampoco pueden ingresar con normalidad a la mina. 

Las Bambas es atacada por todos los frentes del círculo antiminero, cuyos dirigentes y asesores, enlaces de las ONG e incluso personal de algunos ministerios destacados en la zona, azuzan a la población en contra de Las Bambas. 

Las ONG vinculadas al marxismo direccionan los reclamos de los pobladores. Además, a través de los medios nacionales y locales, exigen la nulidad del Decreto Supremo 0011-2016-MTC, mediante el cual la vía —tomada por los pobladores— es declarada vía nacional (Resolución Ministerial Nº 372-2018 MTC/01.02, del 25 de mayo de 2018). Las ONG vinculadas al marxismo promueven el desconocimiento,por parte de los pobladores, de los convenios adoptados por la minera y las comunidades. Por ejemplo, por el acuerdo de 2011 —reubicación de los pobladores en la ciudadela Nueva Fuerabamba— Las Bambas es titular de una servidumbre de paso (derecho de uso de la carretera) reconocida por la comunidad mediante escritura pública.

A este ambiente de confusión, se suman los reclamos de los pobladores por más puestos de trabajo, los que ya fueron ofrecidos por la empresa. Los pobladores no se presentaron a las convocatorias de Las Bambas para cubrir vacantes nuevas. No obstante la agitación en la zona, el diálogo entre las partes continúa abierto. Llama la atención que, estando en el sur (en Moquegua), Martín Vizcarra, mandatario de facto, no se pronuncie respecto al bloqueo de la vía. ¿Dónde quedó el ofrecimiento de acompañar a los proyectos productivos para su normal desempeño? ¿Dónde el derecho al libre tránsito?  

Las Bambas es parte del Corredor Minero del Sur (departamentos de Arequipa, Apurímac y Cusco), en donde se produce el 50% de cobre del país. Por está razón la izquierda antidesarrollo se ha concentrado en esta zona del Perú. Se han propuesto detener los proyectos Tía María en Arequipa, Quellaveco en Moquegua, Constancia en Cusco, Las Bambas en Apurímac y otros más. El propósito es ralentizar la economía para señalar que el sistema ha fracasado y proponer un sistema totalitario como el de Venezuela. 

Mientras la minería participa en la transformación positiva de las zonas alejadas, la izquierda antiminera demoniza, ataca e inventa relatos para confundir a la población. Por la minería, la  disminución de la pobreza es un fenómeno destacable en Apurímac. Según el informe Evolución de la Pobreza Monetaria 2007-2016, del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la pobreza en Apurímac en 2007 se ubicaba entre 65.2% y 71.1%; y en el 2016, entre 32.4% y 36.1%. ¡Tremendo resultado de las inversiones!