Arequipa espera con ansias a Majes Siguas II

En una amplia encuesta realizada en Arequipa en los primeros días de febrero –por IPSOS, a pedido la Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN)– el 83% de los arequipeños se mostró decididamente a favor de que se llegue a realizar el megaproyecto de irrigación Majes Siguas II. Además, ante la posibilidad de que el Gobierno Regional de Arequipa no apruebe el proyecto (como al parecer sucederá, por la ideologización extrema de sus autoridades), el 81% de los encuestados sostuvo que el Gobierno Central debería asumir la gestión de Majes Siguas II, ya que se trata de un proyecto de interés nacional. Así de claro ha hablado “el pueblo” arequipeño, pero sus autoridades se niegan a escucharlo.

Como se sabe, Majes Siguas II representa una inmejorable oportunidad para la agricultura de esta región y de todo el sur del Perú. Con este proyecto se podría abastecer de regadío a 40,00 hectáreas (ha), lo que permitiría incorporarlas a la producción agrícola en predios de más de 200 ha, capaces de convocar inversiones y tecnología para propiciar cadenas agroexportadoras que generarían más de 100,000 puestos de trabajo. Así se podría replicar, en el sur del Perú, el boom agroexportador de la costa norte y del sur chico (Ica), un boom que ha reducido la pobreza en el agro como nunca antes. Además, las aguas generadas por Majes Siguas II permitirían construir dos centrales hidroeléctricas (las de Lluta y LLuclla), que abastecerían de energía a toda la región.

El problema con Majes Siguas II surgió con la llamada “Adenda 13”, que hace modificaciones al proyecto para mejorar las técnicas de riego. Durante tres años esta adenda fue motivo de discusiones y negociaciones entre la empresa concesionaria (Cobra), el Gobierno Regional de Arequipa, el Ministerio de Economía y Finanzas, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, Proinversión y el Congreso de la República. Por fin en julio del año pasado se llegó a un acuerdo y se elaboró un texto final, que debía ser sometido a votación en el Consejo Regional antes del 31 de diciembre del 2021. Pero hasta ahora los consejeros no han llevado a cabo esa votación, seguramente siguiendo directivas partidarias. En la mencionada encuesta de Ipsos se preguntó también sobre este tema a los arequipeños,y el 75% de ellos respondió que se debe aprobar la Adenda 13; y ante la posible cancelación de Majes Siguas II, el 66% de los encuestados consideró que sería responsabilidad del Gobierno Regional de Arequipa.

La empresa Cobra ya ha invertido más de US$ 114 millones, y ha cumplido con todo lo estipulado en el contrato de concesión. Por eso, de cancelarse el proyecto, el Estado estaría rescindiendo el contrato de manera unilateral; y esa transgresión le daría derecho a la empresa concesionaria para solicitar un arbitraje internacional en el CIADI (Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones), que seguramente fallaría favor de la empresa e impondría una elevada multa al Estado peruano. Por otra parte, la empresa Inland Energy, que tiene la concesión para construir la central hidroeléctrica de Lluclla, ya ha solicitado al Gobierno Regional de Arequipa la rescisión de su contrato “por el incumplimiento de las obligaciones del Gobierno Regional de Arequipa, que debía suministrar el agua de Majes II”.