La propiedad amenazada

Sobre el polémico proyecto de ley que busca acelerar expropiaciones.

Hace unos días se aprobó la Ley No. 30327, denominada “Ley para la promoción de las inversiones para el crecimiento económico y el desarrollo sostenible”. El nombre es pomposo y su contenido, a mi juicio, es inconstitucional. En efecto, esa nueva ley establece un procedimiento para expropiar, en el afán de acelerar el desarrollo de la infraestructura, que implica notificar al propietario del predio objeto del interés expropiatorio, proceder a una tasación, expedir una resolución ministerial que aprueba la expropiación y estipula el monto de la tasación efectuada, la consignación de dicho monto en el Banco de la Nación; y, finalmente, la entrega del bien expropiado en un plazo no mayor de treinta días hábiles.

Parece loable fomentar el desarrollo de infraestructura y es cierto que la complejidad y la lentitud de los procesos de expropiación puede incidir en la brecha existente. Pero una cosa es destrabar y otra debilitar el derecho de propiedad. Los derechos de propiedad son importantes porque generan incentivos para la inversión en la adquisición, cuidado y desarrollo de la propiedad. Esos son fines deseables que deben ser preservados. Debilitar el derecho de propiedad es debilitar esos incentivos importantes haciendo de la propiedad una declaración poética sin correlato en la realidad.

La Constitución garantiza el derecho de propiedad y prescribe que nadie puede ser privado de ella si es que no media una ley que determine que existe una justificación en términos de seguridad nacional o necesidad pública. La resolución ministerial es un acto administrativo y, como tal, no puede autorizar una expropiación. El procedimiento establecido en la ley aprobada es inconstitucional. Me parece que la ley es bienintencionada pero no podemos pisar la Constitución alegremente solo para acelerar inversiones. La señal que estamos dando es que, reconociendo que estamos en un hoyo económico, haremos lo que sea –incluso violentar la legalidad- con tal de recuperar lo que varios años de inacción gubernamental han generado.

Por Gustavo Rodríguez García

08 – Jun – 2015