El radicalismo anti inversión y la central hidroeléctrica de Mamacocha

La irracional oposición a un proyecto sumamente beneficioso para la región

Desde este portal hemos insistido en que el radicalismo izquierdista de viejo cuño tiene una estrategia para paralizar la inversión privada en todo el país, frenar la economía, propiciar crisis políticas y conducirnos al desastre estatista. Hoy en Arequipa el movimiento radical intenta paralizar otro proyecto de infraestructura que traería beneficios directos a la población local, así como al país. Este movimiento radical antidesarrollo no solo ha paralizado el proyecto Tía María, sino que ahora se opone a la construcción de la Central Hidroeléctrica de Mamacocha, en el distrito de Ayo (provincia de Castillla), en la región Arequipa. ¿Qué sucede?

En un país como el nuestro, donde existe un gran déficit de infraestructura hidroenergética, la construcción de la Central Hidroeléctrica de Mamacocha —cuya inversión aproximada supera los US$ 60 millones— sería una buena nueva. Hoy sobre el río Mamacocha existe una pequeña planta hidroeléctrica, sin embargo con la construcción de esta nueva infraestructura se incrementaría la actual potencia instalada de la planta existente en 50 kw (hoy es de apenas 20 kw). La actual planta es insuficiente para atender las demandas energéticas del distrito de Ayo y de la provincia de Castilla. Además la energía residual iría a formar parte del Sistema Interconectado Nacional (SIN), a través de una línea de transmisión hasta el distrito de Orcopampa, lugar donde se ubica la planta del SIN.

Según el último censo elaborado por el INEI en el 2007, el distrito de Ayo es uno de los más pobres en la región arequipeña (35% de pobreza) y el menos poblado. En el 2007 habían 360 habitantes y hoy su población no llega a 180 personas. La razón es que la agricultura —poco productiva y competitiva— solo sirve para el autoconsumo y la población debe migrar. Además el distrito ha sufrido una abrupta caída de ingresos, principalmente por canon minero. En el 2011 el distrito recibió S/. 1.4 millones y este año solo S/. 380,000. De construirse este proyecto, los beneficios directos para el distrito serían extraordinarios. Por ejemplo, durante la etapa de construcción se prevé la creación de 250 puestos en los cuales trabajarían también pobladores del distrito. Además se aseguraría el aumento en la renta municipal para treinta años. Hoy el canon que recibe Ayo de la actual planta es apenas de S/. 1,406 y llegaría a recibir ¡S/. 100 mil anuales! durante tres décadas, presupuesto que serviría para mejorar los servicios básicos.

No obstante, el movimiento radical anti inversión nuevamente entra en escena. Así, se ha formado un Frente de Defensa integrado por personas ajenas al distrito y, sobre todo, por líderes que buscan paralizar el proyecto. No es casual entonces que uno de los principales asesores del Frente de Defensa haya sido Jesús Gómez Urquizo, abogado hasta el 2011 del movimiento antiminero que paralizó Tía María y hoy involucrado en la investigación judicial por el “caso lentejas”. Como se sabe, este caso se generó cuando un reportaje periodístico develó el chantaje del líder antiminero Pepe Julio Gutiérrez para levantar las protestas contra el proyecto minero.

De construirse la Central Hidroeléctrica de Mamacocha —que además cumple con todos los estándares ambientales— el distrito de Ayo, la provincia de Castilla y la región Arequipa serán beneficiados. Pero nuevamente el radicalismo anti inversión se opone de forma violenta. No dejemos que este radicalismo triunfe por encima de los intereses y el progreso de nuestro país.