Editorial Política

Chuponeo siniestro

Chuponeo siniestro
  • 14 de agosto del 2014

Sobre las repudiables prácticas montesinistas en plena democracia

De un tiempo a esta parte el “chuponeo” telefónico, la interceptación de correos electrónicos y todo tipo de espionaje han empezado a convertirse en prácticas que se entrometen en las disputas electorales, en las confrontaciones políticas e, inclusive, ahora en las diferencias al interior del Gabinete Ministerial, como acaba de suceder con la interceptación de los correos electrónicos del ex Presidente de Consejo de  Ministros René Cornejo.

La violación de la privacidad de las comunicaciones que consagran la Constitución y nuestras leyes empieza a ser aceptada como un acto cotidiano y todos pasamos a debatir, a opinar, sobre “el destape en cuestión”. Por ejemplo, eso es lo que está pasando con los correos electrónicos de René Cornejo, que principian a ser denominados “Cornejoleaks”. Todos olvidamos el delito que representa el acto de interceptación en sí mismo y comenzamos a debatir sobre el supuesto “lobby” de una empresa petrolera que habría presentado un reglamento para exonerar del Estudio de Impacto Ambiental a la sísmica en las exploraciones de hidrocarburos.

En este Portal no nos casamos con nadie y creemos que el Perú debería tener una normatividad y unas prácticas que permitan identificar una acción de lobby, una acción política, y un legítimo interés periodístico en la defensa de una concepción de política, economía y sociedad. Por ejemplo, en cuanto a los “Cornejoleaks”,  percibimos que el ecologismo radical nos quiere llevar de narices hacia un debate que le interesa sobremanera para detener las inversiones en minería y en petróleo y cambiar el modelo económico.

Si existen 32 proyectos petroleros paralizados con inversiones que suman US$ 2, 500 millones, ¿no es apropiado consultar a las empresas sobre cuál es el mejor camino para agilizar los emprendimientos? Si la empresa es demonizada, caracterizada como fuente de contaminación, como un chupasangre que se lleva las riquezas del pueblo, tal como lo hace el ecologismo radical, entonces, consultar a una compañía sobre cómo agilizar los procedimientos es una barbarie. Pero si queremos fomentar las exploraciones para crecer como lo hace Colombia, y promover las inversiones en recursos naturales para evitar el frenazo de la economía, es atendible consultar a los empresarios sobre cómo facilitar las inversiones. ¿O no?

Un hecho curioso y que ya merece una movilización del país es que la mayoría de las interceptaciones recientes han sido realizadas para favorecer a un punto de vista o a un actor que proviene de las geografías de la izquierda. Los casos están a la mano: los llamados “potoaudios” que favorecieron la elección de Susana Villarán como alcaldesa de Lima, la interceptación a los revocadores de Villarán, de las comunicaciones de Luis Castañeda y del periodista Phillip Butter, y hoy el caso de los “Cornejoleaks”.

Durante los noventa nos la pasamos denunciando el chuponeo del lado oscuro del fujimorato y de Vladimiro Montesinos, pero, con la democracia, el chupón parece haber cambiado de apellido, de camiseta y de geografía. Es hora de tomar cartas sobre el asunto. Los líderes políticos y el Congreso tienen la palabra. No permitamos que estas prácticas formen parte de nuestra vida pública.

 

  • 14 de agosto del 2014

NOTICIAS RELACIONADAS >

Efectivamente, ¡el Perú puede ser una potencia mundial!

Editorial Política

Efectivamente, ¡el Perú puede ser una potencia mundial!

  En una entrevista desarrollada en este portal, el economista C...

23 de abril
Los comandos Chavín de Huántar y la construcción del Estado de derecho

Editorial Política

Los comandos Chavín de Huántar y la construcción del Estado de derecho

  El 22 de abril de 1997 se desarrolló la operació...

22 de abril
El Congreso aumenta poder, pero pierde el rumbo

Editorial Política

El Congreso aumenta poder, pero pierde el rumbo

  Luego de la ola informativa alrededor de los Rolex que utiliza...

15 de abril

COMENTARIOS