Nuevos premios, nuevas polémicas

Otra vez las suspicacias ensombrecen premios Cope y Nacionales de Cultura

En las últimas semanas se han otorgado dos de los más importantes premios culturales del medio: el Copé de cuento y los Premios Nacionales de Cultura. Y como ya se está convirtiendo en una tradición, han surgido serios cuestionamientos acerca de los ganadores y de los jurados encargados de elegirlos.

El caso Copé

Las bienales Copé, que organiza Petroperú, son desde hace bastante tiempo los concursos literarios más importantes en nuestro país, con un monto en efectivo de S/. 30,000. Su jurado suele estar conformado por representantes del Ministerio de Cultura, las universidades Católica y San Marcos, la Academia Peruana de la Lengua y Petroperú. En este año, esos jurados fueron Iván Thays, Alonso Cueto, Edgardo Rivera Martínez y Pedro Cateriano, respectivamente. Ellos eligieron como ganador el cuento “Patrimonio” de Johann Page, y como finalistas los cuentos “Fifteen” de Carlos Arámbulo y “una fotografías, apenas” de Pedro José Llosa.

Por supuesto, quienes conocen el ambiente cultural limeño no han dejado de escandalizarse por estos resultados. Como se sabe, Thays y Page tienen una larga y estrecha amistad, originada en los claustros de la PUCP; incluso hay entre ellos una relación de maestro-discípulo. Y no solo eso, en su condición de director de la sucursal de Planeta en el Perú, Johann Page no solo ha publicado libros de Thays, también de otro de los jurados: Alonso Cueto. ¿Sospechoso? Pues todavía hay que añadirle algo más: Page, Thays y Cueto forman parte (junto con otras tres personas) del Consejo Consultivo de la Fundación para la Literatura Peruana. O sea, un trío de amigos muy, muy cercanos.

El Premio Nacional de Cultura

No menos escandalosa ha resultado la II Edición del Premio Nacional de Cultura 2014, dedicado a las artes visuales y escénicas. Este año el Ministerio de Cultura decidió otorgar los premios al cineasta Francisco Lombardi (Trayectoria) al músico Luis Quequezana (Creatividad) y a la Asociación Cultural La Tarumba (Buenas Prácticas), otorgándoles a cada uno un monto de entre S/. 45,000 y S/. 50,000. De los tres mencionados solo el primero (Lombardi) tiene efectivamente una larga y reconocida trayectoria artística.

Sobre la premiación de Luis Quequezana, el periodista Edwin Cavello (de la revista virtual Limagris) ha dicho: “A ese muchacho, que no es nada original, lo premiaron por su “creatividad”. Luis Quequezana dice que es músico, y algunos le creyeron... En Palacio de Gobierno tiene su mejor amiga y fan. Nadine lo engríe y él sonríe; y también se lanzan piropos: ‘Nadine tiene buena voz y canta muy bien’. ¿O acaso creen que por su talento es el compositor del tema de la COP 20 y músico oficial de la desteñida Marca Perú?”. Lo cierto es que Quequezana, de cuarenta años de edad, solo tiene publicados dos discos: Kuntur (2004) y Combi (2014).

En cuanto a La Tarumba, es un proyecto dirigido por Fernando Zevallos que trata de integrar el teatro, el circo y la música. La propuesta original, que apuntaba a resaltar la participación popular, ha devenido en una lucrativa escuela y en espectáculos con precios cada vez más altos. Por eso, no resulta para nada acertado premiarlos por “Buenas Prácticas” artísticas.