Fernando Vigil

Unos soles de inflación

Unos soles de inflación
Fernando Vigil
24 de diciembre del 2015

Sobre el efecto de las políticas fiscal y monetaria irresponsables

 

Seguro alguna vez se han preguntado por qué hay productos que hoy cuestan más que ayer, o por qué pagando lo mismo que ayer reciben menos hoy. La razón es una sola: Inflación. Como vemos, este fenómeno implica el aumento generalizado y sostenido de los precios de los bienes y servicios existentes en el mercado durante un período de tiempo, es decir, con cada unidad de moneda se adquiere cada vez menos.

Desde la concepción más clásica de la Teoría Cuantitativa del Dinero, como la de la Escuela de Salamanca o la Escuela Austríaca de Economía, llegando hasta la Escuela de Chicago, debemos entender que la inflación es un fenómeno monetario ocasionado por el aumento de la cantidad de dinero más allá de su demanda (inflar sin respaldo). Si tomamos la fórmula de esta teoría, de la interpretación de sus variables podemos afirmar, que si la velocidad del dinero se mantiene constante y crece la oferta monetaria, en un país donde la cantidad de bienes y servicios no crece, vale decir, en un país donde su PBI no aumenta, la única manera de mantener el equilibrio es subiendo el precio de los bienes y servicios.

Este incremento de la oferta monetaria tiene que ver con el accionar del Banco Central, que tiene el monopolio autorizado legalmente por el Estado para acuñar moneda e imprimir billetes. Este accionar sin embargo, responde a veces más a razones políticas que a razones económicas. Los gobiernos populistas, cediendo ante las presiones de diferentes grupos de interés, buscan consolidar un “estado de bienestar” y para ello incrementan el gasto público. Entonces, cuando es gasto que realiza el Estado supera sus ingresos, se genera déficit fiscal. Al existir déficit fiscal, el gobierno se ve tentado a financiarlo mediante endeudamiento con el Banco Central por medio de la emisión de circulante por encima del crecimiento real de la oferta (PBI), lo cual, como es lógico provoca un aumento de la inflación.

La inflación representa lo que los monetaristas, encabezados por Milton Friedman, han llamado, con justa razón, el “impuesto inflacionario”, pues genera una pérdida del poder adquisitivo de los ciudadanos. Un impuesto encubierto y permanente sobre cada moneda que uno posee; que golpea a todos, pero principalmente a los pobres.

En el Perú, con la intención de promover la cultura numismática y contribuir a difundir nuestro patrimonio histórico, cultural y natural, el BCRP ha puesto en circulación, desde el 2013, series de 29 monedas de colección. Suena divertido coleccionar monedas.

Y más recientemente, el Congreso de la República ha promulgado una ley mediante la cual la moneda nacional cambia su denominación de “Nuevo Sol” a “Sol”, esto con el objeto de “(…) agilizar las transacciones económicas y adecuarlo a nuestra realidad económica actual”. ¿Cómo es que un cambio como este puede hacer más fluidas las transacciones en el mercado?

Estas dos “buenas intenciones” son al parecer el pretexto perfecto para que el gobierno pueda seguir financiando su gasto público –particularmente sus programas sociales– mediante la emisión de moneda.
Leyes como estas no solo son absurdas sino también injustas porque su impacto económico en la sociedad es alto, al ser demasiado costosas para todos pues emitir dinero como si no existiera el mañana genera inflación.

 

Libertad para los presos políticos en Venezuela esta navidad

 

Fernando Vigil (@fernandovigilr)

 
Fernando Vigil
24 de diciembre del 2015

NOTICIAS RELACIONADAS >

Privaticemos el matrimonio

Columnas

Privaticemos el matrimonio

Para acabar con las discriminaciones impuestas por el Estado ...

06 de mayo
El ceviche en el socialismo

Columnas

El ceviche en el socialismo

A propósito del debate entre Alfredo Bullard y Farid Kahhat Imagin...

29 de abril
Un voto por la libertad

Columnas

Un voto por la libertad

La izquierda y sus amenazas a las libertades y derechos Desde que ...

08 de abril

COMENTARIOS