María Cecilia Villegas

¡Si el pueblo lo pide, no va!

¡Si el pueblo lo pide, no va!
María Cecilia Villegas
03 de marzo del 2016

Sobre las contradicciones de los candidatos presidenciales

 

Hace unos meses el apoyo del fujimorismo a la intervención del Lote 192 y las declaraciones de Keiko contra las empresas y la élite empresarial sorprendió a muchos. Keiko Fujimori considera que las grandes empresas eran responsables de que proyectos emblemáticos como Conga o Tía María hayan sido suspendidos. Habría que preguntarle luego de ver el desastre ecológico causado por la incapacidad e ineficiencia de PetroPerú si es que la candidata sigue creyendo que el Lote 192 quede en manos de la empresa nacional.

 

Esta vez  le tocó a  Julio Guzmán quien comenzó con un discurso gaseoso, difuso, poco claro: “Tía María tiene las posibilidades de ir siempre y cuando beneficie a todos y las soluciones se den de forma consensuada”. Pero ante las presiones de los pobladores de Islay sostuvo: “Cuando me preguntan si Tía María va o no va, en mi opinión digo que si a pesar del diálogo la población dice al final no, entonces el proyecto minero no va”. Si quien quiere ser el próximo presidente del Perú cambia de opinión y cede ante la presión de un grupo de pobladores, queda claro que el candidato de Todos Por el Perú es más de lo mismo.  

 

El problema de los conflictos sociales se genera por la falta de confianza de las comunidades en el Estado y en las empresas privadas que realizan actividades en áreas cercanas . La falta de presencia del Estado, la pobreza, la inequidad, la mala calidad de programas sociales, la falta de información y el abuso de muchas empresas son responsables de esta desconfianza. Las comunidades al no tener “voz”, son seducidas por organizaciones radicales que recurren a la violencia, destruyen y paralizan regiones del país. Y sin embargo, el estado no ha salido a enfrentar a los radicales y a defender los derechos del resto de peruanos.

 

Echarle la culpa a la empresa es errado. Puede ser popular y ganarle votos al candidato, pero es irresponsable. Si bien es cierto que gran parte del sector empresarial peruano es proclive al mercantilismo y carece de una visión de país, irse contra los creadores de riqueza en plena desaceleración económica y en pleno proceso electoral no es una buena idea.

 

Y es que este tipo de declaraciones levanta y empodera aún más a los violentistas, al demostrar que sus métodos de amedrentamiento son exitosos. En el camino habrán generado expectativas en miles de ciudadanos aledañas a la zona de influencia de las empresas mineras. Comunidades que por cierto, sin inversión privada seguirán viviendo en la pobreza y en el atraso. Porque la evidencia demuestra que el motor que empuja el desarrollo es la empresa privada.  

A inicios de este gobierno fue Conga, luego vino Tía María. Dos proyectos de envergadura paralizados porque grupos radicales se levantaron y obligaron a las comunidades a rechazar la minería moderna. Los políticos olvidan que una parte importante del crecimiento económico del país está basado en la explotación de los recursos naturales. De acuerdo con el BBVA, un tercio del crecimiento económico del 2015 es producto del incremento de la producción de cobre.

Hace unos días un asesor de un candidato presidencial  me decía, “necesitamos un gas a 12 soles” y si pues, los candidatos quieren llegar a Palacio sin importar el daño que generen en el camino.

MARIA CECILIA VILLEGAS

 
María Cecilia Villegas
03 de marzo del 2016

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