Seguridad: se finge avanzar y se retrocede

Sobre las esperadas medidas de gobierno para detener a la delincuencia.

El demagógico discurso, con pincelazos populistas, evidenció que se sigue minimizando la gravedad de la inseguridad ciudadana, que tras 4 años al mando del gobierno (al menos nominalmente) no puede seguir excusándose culpando a sus predecesores.

Los tres Decretos Legislativos publicados en la víspera, suponen un aparato estatal que funcione, como no es así, serán más herramientas en la gaveta de alguien que no sabes usarlas y la inseguridad seguirá empeorando.

El pomposo anuncio de que los policías no podrán vestir uniforme cuando realicen labores privadas, se deriva de la malhadada hipótesis de la percepción, acuñada por  Pedraza. Así, al no verlos uniformados, no sabremos que son policías y por lo tanto, el problema de imagen policial estará resuelto y los peruanos estaremos más seguros. Evidentemente, jamás aprobarían un curso de lógica.

Entre tanto, continúa oculto, como se hace con las maldades, el texto proyectado del grupo de normas legales en materia de seguridad. Es razonable sospechar mala intención. Más si el Presidente sigue evidenciando admiración por el arbitrario Comandante que hundió en el barro la economía llanera y desterró la libertad de un pueblo otrora sonriente.

Tras cuatro años a cargo, el Presidente Humala continúa padeciendo de su defecto político congénito, desconfía de todos los ciudadanos que no lleven su apellido o el de su esposa, considerando de paso, que los empresarios son enemigos del Estado.

El deterioro de la economía y la seguridad ciudadana estos 4 nefastos años, nos costará mucho remontar aún eligiendo certeramente al sucesor, el precio de votar por la inexperiencia y la improvisación.

Explicable el temor ciudadano a lo que se les pueda ocurrir a las cabecitas palaciegas “iluminadas” por Pedraza, responsable del INPE que hoy tenemos, comprador de TETRAS de fantasía, autor del, según ellos, ¨exitoso plan de seguridad¨, encargado de redactar en absoluto secreto el texto de los DL en materia de Seguridad, junto al ex  asesor legal de palacio y el Secretario de Consejo de Ministros. El Ministro del Interior actual, 20 veces más preparado y aterrizado que Pedraza, bien gracias. Su gabinete de asesores, jefe incluido así como el SUCAMEC, parecen continuar a las órdenes del doctor percepción, quien también dirigió el equipo de cuatro personas encargado de redactar el alucinado discurso presidencial que nos endilgaron el 28.

Insistir con tozudez y terquedad en seguir usando un destornillador para martillar clavos, dice mucho del nivel de entendimiento y capacidad de gestión, aunque eso no es novedad. Difícil esperar soluciones en materia de seguridad en este, felizmente, último año.

Pero lo más peligroso no es el contenido de los DL. El Congreso puede (y debe) defender sus fueros y a la ciudadanía, derogando artículos y normas  completas que sean inconstitucionales, abusivas  o simplemente absurdas. Lo más peligroso es que a fuerza de repetir el paso de Michael Jackson (finge avanzar cuando patina retrocediendo) el desgobierno de este quinquenio dejará un terreno minado para el siguiente, que deberá rápidamente emprender con claridad y decisión sostenida las reformas imprescindibles en todos los estamentos encargados de protegernos de la delincuencia.

Y eso lo saben los enemigos de la libertad.

Por Dardo López-Dolz