Dardo López-Dolz

Recuperemos la narrativa

Recuperemos la narrativa
Dardo López-Dolz
08 de noviembre del 2016

Para el fortalecimiento de nuestra libertad y nuestra democracia

Por lo menos desde la década de los años sesenta del siglo XX el marxismo, en sus distintas variantes, inició en el Perú un proceso deliberado de conquista de las aulas escolares y universitarias. En 1972, se fundó el SUTEP (Sindicato Único de Trabajadores de la Educación Peruana), controlado por el partido maoísta Patria Roja hasta nuestros días. La meta, clara desde un inicio, se fue volviendo más evidente con los años: copar los puestos gremiales directivos y adoctrinar a los maestros para que estos a su vez adoctrinen a los niños acerca de las supuestas bondades del totalitarismo marxista, mientras construían un racionamiento antioccidental, antidemocrático y anti libre mercado. Nada han hecho hasta hoy los sucesivos gobiernos para contrarrestar ese destructivo esfuerzo que lleva ya medio siglo.

Los bajos sueldos y el escaso reconocimiento social a la docencia universitaria, han ocasionado que cada vez sean menos los profesionales de primera línea dispuestos a dedicarse 100% a la docencia, apenas unos pocos héroes. Ese vacío ha sido llenado por profesionales que muchas veces no solo no dan la talla (como sucede mayoritariamente en la educación escolar), sino que llegan a la cátedra con una clara consigna de zapa de los valores democráticos y de libertad. El fruto lo vemos en el lenguaje de los estudiantes. Coincidentemente (y no por casualidad) el nivel profesional ha descendido.

La prensa, en todas sus formas, también ha dejado de ser vista por las élites como una actividad atractiva de la cual es posible vivir honestamente. Como en la cátedra universitaria, solo unos pocos asumen la heroica función de estudiar y prepararse para defender cabalmente nuestros valores de libertad. La creciente mayoría proviene de facultades que los formaron muy bien en las formas de comunicar, sin darle importancia al fondo. Muchos de los jóvenes periodistas son artistas del efectismo verbal o gráfico, pero carecen (por culpa principal de las facultades que los formaron) del conocimiento universal que le dio su nombre a la universidad. Las distintas etapas de historia y la filosofía les son absolutamente ajenas, situación que los priva de las herramientas indispensables para una interpretación integral de los hechos. El resultado, lo que vemos a diario en TV, radio y prensa escrita.

Como es iluso pensar que los propios docentes marcadamente antidemocráticos —que hoy ostentan el control de la escuela y la cátedra— se conviertan en defensores de la democracia, o que los periodistas de cuño joven retornen a las aulas, es imprescindible ser creativos para diseñar la herramienta que permita enriquecer la narrativa de la historia, en aras del fortalecimiento de nuestra libertad y nuestra democracia. Esa responsabilidad recae entonces en quienes teniendo los medios materiales para aportar son conscientes de la necesidad de ocupar un espacio relevante en la narrativa de la política, la historia y la noticia. Seguir postergando esa decisión es no mirar más allá de la nariz, para lamentarse después, cuando sea tarde, como se lamentan sus pares en Venezuela.

 

Dardo López-Dolz

 
Dardo López-Dolz
08 de noviembre del 2016

NOTICIAS RELACIONADAS >

¿Lomo fino a precio de chanfainita?

Columnas

¿Lomo fino a precio de chanfainita?

Peruanos de toda laya esperan y hasta exigen calidad de servicio sin l...

21 de marzo
Temas a tener en cuenta ante la expansión china

Columnas

Temas a tener en cuenta ante la expansión china

Animados por el apetito de ganancia personal de corto plazo, muchos ol...

14 de marzo
Milei en el CPAC

Columnas

Milei en el CPAC

La presencia de Javier Milei, el primer presidente genuinamente libera...

26 de febrero

COMENTARIOS