Jorge Morelli

Metas mediocres

Metas mediocres
Jorge Morelli
06 de julio del 2016

La administración PPK apunta a un crecimiento de 3% anual

Para crecer 6% anual, el Perú necesita invertir 25,000 millones de dólares adicionales cada año y alcanzar una inversión total de 70,000 millones de dólares anuales. Tenemos una infraestructura paupérrima y, para financiar una a la altura del siglo XXI, necesitamos invertir unos 12,000 millones de dólares cada año en los próximos cinco años. Teóricamente, podrían provenir de la inversión extranjera directa o, alternativamente, de la inversión pública financiada con endeudamiento o con recaudación fiscal.

Lo último es una quimera. Hay, es verdad, diez puntos porcentuales de presión tributaria que ganar para alcanzar a otros países de la región. Eso equivale a unos 20,000 millones de dólares por año. Pero desinformalizar la economía peruana es algo que, en el mejor de los casos y al ritmo de un punto porcentual por año, tomaría una década y dos gobiernos. Además, el futuro ministro de Economía insiste todavía en reducir el IGV en un punto, de 18% a 17%. A ver si el experimento funciona y la recaudación sube, luego de caer, y permite recuperar lo perdido con creces. Pero no es así como se podrá financiar esa inversión.

Resta la posibilidad —teórica, al menos— de financiarla con déficit fiscal. Pero este apenas si sería de unos 6,000 millones de dólares por año, y el país tendría que endeudarse peligrosamente. En cinco años, ese nivel de endeudamiento —similar quizás al de los demás países de la región— podría hacerle perder el grado de inversión, según han advertido las clasificadoras de riesgo. La opción, por ahora, ni siquiera es legal; sin embargo, es muy improbable que el Congreso modifique esa ley.

La inversión privada peruana no es suficiente. Así, pues, resta únicamente la inversión extranjera directa. En lo inmediato, PPK anuncia destrabar 8,000 millones de dólares parados en el Gasoducto del Sur, la Línea 2 del Metro, la refinería de Talara y el aeropuerto de Chinchero. Aun si esos proyectos estuvieran exentos de problemas legales, eso tampoco basta.

PPK planea entonces un viaje a China, para conseguir masiva inversión china directa en infraestructura. Si volviera de China con las bolsas vacías, el Perú solo logrará, en el mejor de los casos, crecer a un pobre 3% anual en los próximos cinco años. En tal caso, lloverán piedras. Pero se deberá a que se apunta demasiado bajo, hacia metas mediocres.

No se están debatiendo las reformas de fondo que el país necesita. El futuro gobierno no se atreve a planteárselas con toda franqueza a los peruanos. Mira el árbol y no el bosque, anda en las raíces, sin subir a la copa en busca de perspectiva. Es el líder el llamado a levantar la cabeza, mirar lejos y hacer que su gente deje de buscar el rumbo contemplándose el ombligo.

 

Jorge Morelli

@jorgemorelli1

jorgemorelli.blogspot.com

Jorge Morelli
06 de julio del 2016

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