Los “zurdos” Keiko y PPK

¿Cuánto ganan la señora Fujimori y Kuczynski diciendo que son de izquierda?

Con asombro he escuchado en las últimas semanas a Pedro Pablo Kucynski y Keiko Fujimori afirmar que, si tuvieran que ubicar a sus respectivos proyectos políticos en un sector del espectro tradicional de las tendencias políticas, ambos lo harían en la “centro-izquierda”. Creo que están terriblemente confundidos si creen que dándose a sí mismos un “toque izquierdista”, una capita de barniz zurdo, van a conseguir más votos.

¿Alguien podría creer que Kuczynski puede ser un política de izquierda? A muchos esto podría parecerles incluso risible. PPK ha dicho que en asuntos económicos es de “centro derecha”, pero en agua y salud es “de izquierda”. ¿Cómo entender sus palabras? ¿Quiere decir que en materia de agua y salud pública está dispuesto a aplicar políticas de izquierda, es decir estatismo y populismo? Si es así, entonces puede definirse como quiera, pero será en esencia anti-pobre, porque si actualmente hay millones de peruanos sin agua ni servicios de salud es por culpa de esas políticas.

Keiko Fujimori ha declarado que su partido es de “centro izquierda” porque gran parte del electorado fujimorista proviene de sectores populares de tendencia izquierdista…” Su lectura es errada porque todas las encuestas indican que los más altos niveles de desaprobación ciudadana al gobierno izquierdista de Humala y a la alcaldesa izquierdista Susana Villarán están en los segmentos socio-económicos C y D. En contraste, la mayor aprobación de ambos políticos se da en los segmentos A y B.

Un ejercicio muy útil que debieran hacer PPK y Keiko es visitar a los emprendedores de los sectores populares y conversar con ellos sobre sus problemas y sus expectativas. Entonces verán que el “Estado fuerte” es su peor enemigo, el que les impide acceder a la formalidad, el que los persigue con inspectores que solo saben multar y clausurar sus negocios; el que les pone mil trabas para abrir un taller o una tienda. Los emprendedores, que son la fuerza emergente que mueve la economía, de ninguna manera apuestan por las ideas de izquierda porque son víctimas de las políticas estatistas e intervencionistas que castran su libertad.

Y también son las principales víctimas de la delincuencia organizada que les cobra cupos bajo amenaza de muerte, impunemente, porque el Estado que les exige que paguen impuestos es incapaz de protegerlos de hampa o es cómplice de ésta en sus instituciones corroídas por la corrupción. En San Juan de Lurigancho, por ejemplo, un número indeterminado de pequeños empresarios cierran sus negocios cada día por la inseguridad en que viven.

Los líderes políticos no solo deben hacer campaña, también deben hacer docencia política, formar conciencia ciudadana y difundir los valores democráticos. Les corresponde enseñarles a los ciudadanos que las ideas estatistas y populistas, que lamentablemente priman en la izquierda peruana, llevaron al Perú al abismo de la pobreza, el desgobierno, la violencia y la corrupción; nos convirtieron en un país sin crédito, sin reservas, quebrado, a punto de convertirse en un estado fallido. Y que la democracia y la libertad económica nos liberaron de esas pesadas cadenas llevándonos por la senda del progreso.

Por último, PPK, Keiko, y los demás líderes demócratas confundidos igual que ellos, debieran meditar si acaso, por ganar un poco del 30% del electorado izquierdista duro no estarán perdiendo votos en el 70% de electores que no votan por la izquierda.

Por Víctor Robles Sosa