Martin Santivañez

La herencia del Rey

La herencia del Rey
Martin Santivañez
13 de junio del 2014

Juan Carlos I, artífice de la Iberoamérica moderna

La construcción de Iberoamérica no se comprende sin el gran papel que ha desempeñado Juan Carlos de España. La importancia de la diplomacia directa que ha ejercido la corona solo podrá ser sopesada a cabalidad en el futuro, aunque ya en la actualidad tengamos muestras palpables de todo lo que ha significado para la región. La figura del Rey es una prueba concreta de hasta qué punto es importante el liderazgo en la construcción de un sistema institucional. Es imposible imaginar la comunidad iberoamericana de naciones sin reconocer la impronta de Juan Carlos. Él, personalmente, se encargó durante años de tender puentes y crear lazos, uniendo países y vinculando líderes específicos. El Rey, plenamente consciente de su misión articuladora, cruzó el océano intentando restaurar la unidad perdida tras el proceso independentista.

Durante décadas Latinoamérica tuvo un discurso hispanista, especialmente durante el novecientos. Sin embargo, el Rey de España ha sido el gran protagonista de un hispanismo funcional, un hispanismo realista que se ha centrado en la consolidación de un nuevo vínculo económico, político y social. El juancarlismo también ha tenido una manifestación geopolítica y la diplomacia monárquica ha demostrado una alta efectividad teniendo en cuenta que se ha ejercitado en sociedades donde la personalización de la política es la moneda común. El liderazgo, la calidad del liderazgo, es fundamental para comprender la política latina y mucho más si abordamos la dimensión internacional. Las relaciones internacionales latinoamericanas están lejos de la institucionalización impersonal y por eso el aporte del Rey es positivo porque ha sabido, respetando los valores democráticos, fomentar vínculos personales con la clase dirigente latina, consolidando, además, una imagen positiva de la Corona entre los latinoamericanos.

De allí que la herencia del Rey sea fundamental para comprender el futuro papel de España en la región. Cualquiera que sea la influencia real de Madrid en Latinoamérica, gran parte de esa influencia se debe a la Corona y a su capacidad de establecer vínculos personales con todas las fuerzas políticas, empresariales e intelectuales del continente. El Juancarlismo geopolítico, por lo demás, se traslada intacto a su heredero, Felipe VI. En efecto, el todavía Príncipe de Asturias ha trabajado toda su vida adulta, bajo la guía de su padre, como un gran embajador de la marca España en el mundo.

Esta tradición monárquica de unidad iberoamericana se mantendrá bajo el reinado de Felipe de Borbón teniendo en cuenta que la mayor parte de los intereses geoestratégicos de España están relacionados con su rol como país iberoamericano. La unidad iberoamericana ha sido fomentada a la par que los principios comunes sobre los que se funda la propia idea de la monarquía constitucional: la libertad, la justicia y la solidaridad.

Estamos, por tanto, ante una nueva hispanidad propia del tercer milenio, una hispanidad promovida por el Rey Juan Carlos y prolongada en su estirpe. En ésta, lo que importa son las personas, los seres humanos, no los territorios. Los millones de latinos repartidos por todo el mundo —más de 50 millones de ellos viven, por ejemplo, entre EEUU y Canadá— forman parte de la comunidad espiritual del hispanismo, sin importar en qué lugar se encuentren.

Los latinos somos 'hispanóforos', portadores de la hispanidad en el nuevo orden global. La cultura no se circunscribe a un espacio determinado porque viaja con las personas. Se expande y enriquece, en un proceso de perpetuo mestizaje. La herencia de la monarquía española se vincula a este hispanismo funcional, moderno, que fusiona trayectoria y destino en una fuerza política y diplomática capaz de mantener vivo el vínculo de unidad que puede y debe promover la consolidación de una comunidad iberoamericana basada en la democracia, el Derecho y la libertad.

 

Por Martín Santivañez

Martin Santivañez
13 de junio del 2014

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