Guillermo Vidalón

La escuela y la calle… cívica

La escuela y la calle… cívica
Guillermo Vidalón
14 de enero del 2015

La importancia de los paradigmas sociales en la formación de las personas                

Cuando uno selecciona una escuela para sus hijos suele tener en cuenta varias consideraciones, como por ejemplo que brinden a las próximas generaciones herramientas suficientes para promover una vida en armonía familiar y social, de respeto mutuo, conductas éticas y que sean capaces de satisfacer sus propias expectativas.

Una escuela donde se promueva la creatividad, la productividad, la meritocracia, el debate alturado y tolerante frente a la diversidad de opiniones, el respeto a la ley y al principio de autoridad. Todos estos son valores cívicos que garantizan una vida en sociedad pacífica y respetuosa, tanto de género como de la propiedad privada legítimamente adquirida.

Las escuelas constituyen el segundo escalón formativo para las personas; el primero, sin lugar a dudas, corresponde a la familia. Mas el espacio formativo de las personas trasciende a la familia y la escuela, se consolida en el diario quehacer, en las imágenes con que nuestros líderes se presentan ante la sociedad.

Difícilmente los padres de familia quisiéramos para nuestros hijos una escuela donde el auxiliar de conducta denigre públicamente a otras personas frente a los educandos y que el actual director se abstenga de poner orden. Los jóvenes educandos recibirían como mensaje implícito: “No existe el Principio de Autoridad, el Reglamento de Conducta de la Escuela es simplemente un papel impreso”.  Por ende, podemos hacer lo que nos venga en gana.

Sin lugar a dudas, los jóvenes estudiantes de una escuela seguirán equivocándose y habrá que volver a enseñarles el rumbo adecuado, pero la mejor manera de hacerlo es que la Autoridad de la Escuela se convierta en el modelo a seguir, en el paradigma de conducta por su respeto al reglamento.

La siguiente historia monárquica que grafica la diferencia entre ser parte de un conjunto y asumir la representación del conjunto: “El rey estaba muy enfermo, los médicos de la corte ya habían intentado todo para recuperar su salud, y finalmente decidieron desahuciarlo. Consciente de lo que estaba próximo a suceder, convocó a la reina y a su hijo -el príncipe heredero al trono- para transmitirles sus últimos consejos. Luego de algunas frases, el rey exhala su último aliento de vida. El joven príncipe angustiado pregunta a la reina “Madre, ¿qué vamos a hacer?”. Ella reina voltea, se inclina ante él, y le dice –“Lo que usted decida Majestad”.

La autoridad personifica el consenso ciudadano y éste se expresa a través del Estado de Derecho, el cual se sustenta en la ética colectiva, la costumbre y la legislación. Si el director de la escuela soslaya la valoración ética de las normas y reglamentos, lo que termina promoviendo como paradigma de conducta social es “la criollada”, la sacada de vuelta a la norma, la impunidad, la informalidad, el machismo rampante -y en su extremo más negativo el feminicidio-, la prepotencia, el “aquí se hace lo que me viene en gana”.

La violencia de los años 80 del siglo XX ocasionó entre 25 mil y 75 mil fallecidos - según la fuente que se desee consultar-, pero ello se erigió sobre una quiebra de valores ideologizada que justificó su accionar argumentando la pobreza material existente; sin embargo, nunca propuso un camino pacífico y racional para reducirla.

Dios libre a nuestros hijos de un director pusilánime y un auxiliar beligerante.

Por: Guillermo Vidalón del Pino

14 - Ene - 2015

Guillermo Vidalón
14 de enero del 2015

NOTICIAS RELACIONADAS >

Cobre: oportunidad perdida

Columnas

Cobre: oportunidad perdida

Durante la semana, según información de un medio local, ...

29 de marzo
¿Cómo lograr la aceptación social?

Columnas

¿Cómo lograr la aceptación social?

Durante los últimos siete días se llevaron a cabo divers...

26 de enero
¿Ricos versus pobres?

Columnas

¿Ricos versus pobres?

Por desconocimiento hay quienes argumentan que existe un sistema de pr...

18 de enero

COMENTARIOS