Iniciativa y más iniciativa

El Ejecutivo debe tener una actitud más proactiva

Desconozco si el presidente de la República ha llegado a la conclusión de que hacer cambios en el Gabinete es una necesidad imperiosa o no. O si más bien, tal como sucedió con el caso de Martín Vizcarra, tendrá que aceptar algunas dimisiones como forma de salvaguardar objetivos más trascendentes.

De lo que no me queda duda es que si en Palacio aún no han entendido que solo manteniendo la iniciativa política en forma proactiva (y no reactiva, como acaba de suceder con el Reglamento de la Ley de Alimentación Saludable, a propósito del caso Pura Vida) los niveles de buena sintonía con la población —y por ende, el músculo para enfrentar los embates de la oposición— seguirán decayendo progresivamente.

Y voy a poner un ejemplo para algunos quizá harto debatible. Creo que Carlos Basombrío en el Mininter está mostrando resultados tangibles, casi semanales, de avances y resultados concretos en materia de lucha contra la inseguridad ciudadana. Claro, es evidente que ello no reduce significativamente la percepción crítica en la población acerca del crimen. Es una obviedad que se requiere continuidad de políticas en el sector y, sobre todo, el cumplimiento de un rol mucho más eficiente de parte de otras entidades como el Ministerio Público, el Poder Judicial, el INPE y los municipios.

Pero lo cierto es que se evidencia una gestión muy activa, honesta en cuanto a no “sobrevender” resultados para las tribunas (al estilo Urresti), y hasta innovadora. Paradójicamente, Basombrío tiene encima la puntería del fujimorismo, y veremos cómo se conducirá el próximo 21 en el Pleno del Legislativo. Voy más allá: si Fuerza Popular lo desea fuera del Gabinete por la vía de la censura, tendrá que recurrir a mucha más imaginación que el solo hecho de calificar al ministro como “caviar” y el incidente del Movadef. De lo contrario se mostrará —otra vez— como bancada abusiva y nada razonable. Algo similar, con menores resultados debido al poco tiempo en la cartera, es que lo exhibe Bruno Giuffra en el MTC.

Bueno. Ese es el talante que deberá demostrar el Ejecutivo. No hay otra ruta posible. O asume la iniciativa y lidera la agenda política, comunicando con la menor cantidad de errores, o se limita a una defensa permanente frente a las amenazas y el bullying de todo tipo.

La capacidad existe y se demostró cuando el fenómeno de El Niño costero. Si algún consejo tuviera que darle al Gobierno es que mantenga y conserve el chip de la emergencia del verano último. Cada sector tiene un sinfín de urgencias que afrontar, varias de ellas con posibilidades de éxito. El reto de la reconstrucción con cambios es el contexto y el pretexto ideal para que la iniciativa se mantenga al tope, involucrando incluso a los gobiernos subnacionales.

Cuestión de decisión. Pura decisión e iniciativa. Es muy poco lo que se perdería si se asume el riesgo.

Mario Saldaña C

@msaldanac